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Yoongi

Desde que se que Kim Namjoon anda tras de Ji Eun, un lado posesivo que no sabia que tenia ha despertado en mi, en verdad me molesta que alguien mas trate de estar con ella, pero tampoco es como si fuera muy claro con respecto a lo que siento. Desde que la bese, mi cabeza no deja de decirme que necesito mas, que debo de decirle que me gusta de una manera mas clara, pero también estoy algo asustado, desde la madre de Doyun jamás había sentido nada por nadie.

—Necesito un aumento —Jimin me dejo una taza de café —no solo soy tu secretario, ahora también tu psicólogo y tu motivador del amor.

—¿Motivador del amor? —bebi de la taza mirándolo con extrañeza.

—Si, desde que ya te disté cuenta de lo que llevo diciéndote desde hace mucho, tienes esa cara de tonto y debo de regresarte al mundo real mas seguido de lo que piensas —iba a hablar, pero me interrumpió —y antes de que digas que solo fue un beso, déjame informarte que eso no fue solo un beso, ya es mas que eso, ella te correspondió así que tienes que ponerte los pantalones y en el campamento con Doyun decirle todo lo que sientes.

—Demonios el acampado con Doyun —me frote el rostro —lo había olvidado.

—Claro que si, tu cabeza esta en tu cuerpo, pero tu mente esta en una linda castaña llamada Bae Ji Eun.

Cada año libero una semana de mi agenda para poder celebrar el cumpleaños de Doyun en una cabaña en Seowipo, a mi hijo le encanta explorar el lugar y logramos pasar tiempo juntos, pero ahora no solo estará mi hijo, estará ella.

—¿Iras también?

—Claro que iré, no puedo perderme de ti actuando torpe es como mi bono de navidad por todo lo que me has hecho trabajado extra.

—No he podido hablar con ella, en parte lo agradezco porque no se que decirle.

—Buscare en internet frases para declararse a mi niñera.

Jimin me recordó todas las groserías que conozco, pero si. No sabia que decirle.

El día de partir llego, no había dormido bien por los nervios de verla de nuevo. Cuando baje de mi habitación para llevar la maleta ella estaba en el vestíbulo junto con Doyun y un niño mas.

—Buenos días señor ministro —me hizo una reverencia.

—¿Hoshi cierto?

Asintió sonriendo.

—Ya esta todo en el auto, nada mas faltan sus maletas señor ministro.

Escucharla hablar hizo que el corazón me latiera rápido, por dios estoy actuando como un adolescente, y ella se ve muy tranquila.

—Enseguida las subo.

—Yo lo hare —Jungkook tomo mis cosas para llevarlas.

—Nos adelantamos al auto, vamos Hoshi.

Doyun salió corriendo con su amigo, Ji Eun empezó a hacerse una coleta alta, no había notado su vestimenta hasta que se quedo quieta en la entrada, llevaba un short caqui algo corto mostrando sus lindas piernas, la camisa se le pegaba al cuerpo, tuve que darme unos golpecitos en el rostro al notar que la miraba como si deseara comérmela.

—Ji Eun.

—Diga ministro.

Iba abrir la boca, pero no salía ninguna palabra.

—Vámonos, necesitas aire fresco para ese cerebro tuyo —Jimin me palmeo la espalda —discúlpalo querida aún no agarra señal.

—Bien, me adelanto entonces.

My nannyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora