𝖡𝗎𝗌𝖼𝖺𝗇𝖽𝗈 𝖠 𝖯𝖺𝗉𝖺́ -𝖭𝖺𝗆𝖩𝗂𝗇

Capítulo Catorce.

Ahí se encontraba, dando vueltas por el pasillo sin saber cómo llegar y golpear la puerta. Era algo sencillo si fueran otras condiciones, si él y TaeHyung se llevarán bien como medios hermanos normales, pero no lo eran y todo eso complicaba el hecho de que debían estar juntos por casi cinco días.

De todos modos JiMin debía ver el lado positivo de las cosas, si TaeHyung no estuviera ahí entonces posiblemente él sería mandado a la par con JungKook y sus abuelos. Pero ahora tenía la ventaja de poder tener una fiesta sin supervision de algún adulto.

Entonces era fácil, y teniendo las idea de que las cosas eran buenas se detuvo frente a la puerta y la golpeó para abrirla un poco segundos después. TaeHyung estaba ahí, acostado boca abajo con la cabeza ladeada hacia la orilla y con el celular en una mano mientras veía una película.

"Una historia del Bronx" película que TaeHyung veía, contaba la historia de Calogero, un chico de raíz italiana que creció en los barrios americanos siendo criado dos veces; una por la escuela y otra por la calle. Tal vez la veía porque se identificaba con ese chico, eran situaciones diferentes pero ya había sido educado por la calle, ahora estaba siendo educado por la escuela.

Estaba tan metido en la trama y sorprendido por lo genial que era el personaje de Sunny, que sólo quito la vista de la pequeña pantalla cuando JiMin carraspeo un poco.

-¿Qué haces en mi cuarto?- preguntó como si nada y el rubio tragó pesado.

-Sólo pasaba a saludar. Oye por qué ves una película en tu celular teniendo la pantalla aquí, o la computadora incluso tienes laptop.

-No creas que voy a creer que solo viniste a eso

-Está bien- bufo rendido mientras se desplomaba más en la silla-. Sólo quería darte un aviso por parte de mi papá.

TaeHyung alzó las dos cejas esperando por más.

Así  el rubio fingió una sonrisa con labios cerrados.

- Mi papá NamJoon dejó que hiciera una fiesta con unos amigos mientras ellos están en el crucero...- pensó que TaeHyung diría algo, pero al constatar que no ibas ser así, continuó. - parece que quiere arruinarme la vida ahora que soy adolescente así que me pidió de favor que te invitara.

El moreno soltó una risita mientras le daba la espalda aún con el celular en mano.

- Olvídalo, no quiero involucrarme en eso.

- Lo supuse- interrumpió. - pero el insistió así que para ahorrarnos toda esta discusión por qué simplemente no invitas a uno de tus amigos raros y se encierran en tu cuarto. Deja que los mayores se diviertan.

-Yo soy mayor que tú.

- Realmente no parece... aún así, pueden pedir pizza como los raros que son y ver películas. ¿no es algo que hacen ustedes los rechazados?

Taehyung soltó un ash antes de volver a voltear con el rubio. -No te preocupes por eso, yo hablare con él para que se olvide de todo esto. ¿Okey? Ahora sal de mi habitación antes de que yo lo haga.

Por su parte JiMin sonrió confidencial, en su mente ya se imaginaba disfrutando de aquella noche llena de locura sin que su medio hermano arruinara las cosas.

Y es que eso no pasaría. TaeHyung ganó popularidad en el colegio por ser quien es, un chico misterioso y muuuy atractivo que era indiferente con las chicas, tal parece eso las volvía locas.

Pero JiMin no lo veía así, él pensaba que TaeHyung era el mismo raro para todos como lo era para él. Vaya error.

Después de eso la noche dió su lugar a la mañana un jueves lindo con canto de pájaros, pero con gritos e idas y vueltas. Tal parecía que la vida de los Kim seguía siendo revoltosa por las mañanas.