Odio ser omega (Jimsu)

Capítulo 69

Narra Taehyung.

Dos años atrás...

_¡Por Dios, Taehyung, camina más derecho! _Me regañó mis madre al verme caminar con unos libros sobre la cabeza_ .Y que no se te caiga ninguno.

_¿Qué? _Dije y sin querer los dejé caer.

Lo próximo que sentí fue la mano de mi madre golpear mi cabeza con fuerza una y otra vez repitiéndome lo inútil que era.

_Sin duda, eres un estúpido al igual que tu padre _Mi madre miró a mi padre que revisaba los gastos de la casa_ .Gracias a Dios, sacaste nuestra belleza, sino no servirías para nada.

_Mamá...

_Sólo digo la verdad, querido. Tienes que disfrutar de tu belleza mientras la tienes porque después cuando seas una persona obesa y vieja como yo, nadie te querrá.

Formé un puchero y una lágrima resbaló hasta mi mentón.

_Mis amigos sí _Dije con voz bajita.

_¿Tus amigos? ¿Hablas de Yoongi y tu noviecito Jungkook? Por favor, cariño, los chicos sólo quieren de ti tu cuerpo para después irse con alguno que realmente les interesa. ¿O que piensas que están contigo por tu gran personalidad o intelecto? No tienes nada de especial, no seas ingenuo _Jadeó exasperada.

_Mamá, tengo hambre.

Lo único que había comido en los últimos dos días eran pedacitos de zanahoria y estuve llenando mi estómago con agua.

_Pues mastica hielo porque mañana tienes una audición. Veremos si por fin puedes servir de algo y sacarnos de esta miseria _Me advirtió sentándose y comiendo pollo frito con las manos.

Sólo me preguntaba porque era tan exigente conmigo, porque me trataba como si fuera un simple muñeco al que podía usar para que desfilara delante de gente que a veces era mala y perversa.

...

Me veía frente al espejo y no me reconocía.

Siempre he sido una persona muy sensible que cada vez que siente demasiadas emociones juntas no puede evitar llorar, llorar demasiado.

No podía creer que mi mejor amigo, la persona a la que le había dado toda mi confianza, con la que pase los últimos años me haya traicionado de esa forma.

Dolía tanto, peor que un corazón roto, era como perder una parte de ti.

Me sentía tan mal, tan solo, tan... roto.

Levanté mi mirada y observé mi reflejo. Mi cabello despeinado y el rostro sin maquillar dejando a la vista mis lunares y algunos granos que me habían brotado.

Si mi madre me viera así no le gustaría nada, a ella le gustaba que siempre me vea hermoso, reluciente, feliz.

Y luego me preguntaba si a mí me gustaba lo que veía, me gustaba a quien veía.

Recordé cuando Jimin me habló sobre sus visitas recurrentes a terapia y el último ejercicio que le había asignado su terapeuta. Consistía en repetirte cosas positivas de ti frente al espejo todas las mañanas cuando te levantes y dijo que le estaba funcionando.

Miré a Taehyung ese que había sufrido tanto por las dietas, las discusiones de sus padres, por los falsos rumores y amistades, por corazones rotos y palabras hirientes, por el sexo sin sentimiento, por los abusos, por las relaciones tóxicas.

Por todo.

Y me repetí que era fuerte por seguir aquí.

Que era muy bonito hasta sin maquillaje e incluso cuando subía unos kilos.