Savior Complex

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ABRIL BROWN

Abrí mis ojos muy confundida y sintiendo una sensación de vacío muy pronunciada. No veía nada físico a mi alrededor, ni un mínimo objeto o una mísera alma. El silencio que reinaba era sepulcral y tuve que entrecerrar mis ojos porque la luz blanca era bastante intensa. Sin embargo, mis ojos se adaptaron pero todavía no podía ver ningún indicio de algo que pudiera reconocer. No sabía dónde estaba.

Decidí empezar a caminar hacia el frente, hacia la gran masa blanca que se extendía sobre mí. Pude ver una figura que cada vez estaba más cerca de mí, parecía una persona pero no podía reconocer quien era. No lo hice tampoco cuando el chico se encontró frente a mi. Era más alto que yo, considerablemente, pelo moreno, cejas pobladas, ojos marrones.

Un sentimiento de familiaridad recorrió mi cuerpo pero no supe adivinar porque, mi mente se encontraba vacía.

- Hola Abril -me dejo ver su bonita sonrisa-

- Hola... -le mire confundida-

- Fernando, soy Fernando -no conocia a ningun Fernando, estaba confundida-

- Encantada -me removi algo incómoda a pesar de la sensaciones de familiaridad que me transmitió el chico-

- ¿No me reconoces? -juntó las manos tras su espalda- soy el hermano de Pedri

Pedri... el nombre me sonaba familiar y sentí un calor en mi pecho muy repentino. Pero por mucho que intentara e hiciera esfuerzos por recordar algo no podía. Tan pronto como el calor en mi pecho apareció se fue, se fue haciéndome sentir por un momento miserable.

- Lo siento -le mire y sus ojos se abrieron con sorpresa- no se quien es Pedri -murmure-

El silencio que empezó a reinar se estaba haciendo bastante largo, y aunque presentía que mi respuesta no había sido positiva para la persona que tenía delante, hizo lo mejor por disimularlo.

- No pasa nada -me regaló otra sonrisa- lo importante es que estás bien -asintió con su cabeza-

- ¿Dónde estoy?¿Dónde están mis padres? -pregunte confundida-

- Pronto estarás con ellos Abril -miró hacia arriba- han pasado cuatro meses.

- Eso es mucho tiempo -junte mis manos y mire nerviosa a mi alrededor pero escuche una risa floja-

- Ahora entiendo porque mi hermano no ha podido enamorarse de otra persona -sus ojos me analizaban pero por alguna razón, no me hacia sentir incomoda-  eres tierna

- ¿Como? -pregunte mas confundida aun-

- Nada no lo tomes en cuenta -hizo un gesto con su mano y extendió la misma- ¿me concedes un paseo antes de que tengas que marcharte?

Si bien no lo conocía de nada era la única persona que parecía existir en este lugar tan vacío, por lo que me limite a agarrar su brazo con la fuerza suficiente para no caer. Aún me encontraba un poco mareada.

- ¿Dónde estamos? -mire su perfil- esté lugar está tan vacío y triste -mire a mi alrededor-

- Estamos en tu cabeza y ahora todo tiene
sentido -suspiro y me miró- has tenido una operación muy importante de corazón Abril, quedaste en coma por varios meses -intente tranquilizarme al escucharle- y por esto te encuentras tan vacía y confundida, al igual que tu mente, pues has perdido la memoria -apretó mi brazo cariñosamente y sentí mis ojos aguarse-

Apenas recordaba a mis padres, ¿como lo haría con todo lo demás?¿Conocía a Fernando de antes? ¿A ese tal Pedri? ¿Qué pasaba con mis amigos? Sentí como mi corazón dolía un poco, pero ya no era un dolor físico, era un dolor emocional. Inconscientemente apreté el brazo del chico que tenía a mi lado.