"El celo de los omegas puede llegar a durar al menos una semana, llamando a algunos alfas para que les ayuden o si tienen el lazo, su alfa podrá escuchar su llamado y llegar a oler su aroma aunque se encuentren lejos el uno del otro."
Charlotte leía con una sonrisita mientras veía a su alfa moverse de un lado a otro.
—Andrés, deberías calmarte, ni siquiera con Maia te pusiste así
—Ana se sabe cuidar sola, pero Horacio no, Horacio está entre alfas idiotas que no hacen más que acosar a los pobres omegas que están cerca.
Charlotte comenzó a reír, llamando la atención del mayor que le miró tímido.
—Sabes bien qué hay muchos alfas que cuidan a los omegas en esa comisaría y también está Volkov que puede cuidarlo siendo agente federal.—decía mientras alejaba el libro e invitaba al mayor a sentarse junto a ella.
—Además.—comenzó a decir mientras sonreía con un pequeño carmesí en sus mejillas.—Yo era una pobre omega como tú dices hace algunos años y solo tú acudiste a mi llamado, no una, y tampoco dos si no...
—Ay Charlotte ya no sigas.—le interrumpió apenado mientras llevaba su cabeza al pecho de la omega, escuchando su corazón latir frenético.
—Debes dejar a Horacio, no es un niño y tampoco un adolescente.
El alfa asintió pesadamente, sintiendo como la menor jugaba con los mechones de su cabello.
—Me calmo pues...
~•~•~•
Su respiración agitada le hacía saber que no estaba bien
Su corazón latiendo frenético hacía consciente a su cerebro de que solo quería tener al alfa de cabellos platinados cerca de él
La tensión en la habitación era palpable y el sonido de la puerta ser abierta lo puso en completa sumisión mientras se agarraba su estómago con fuerza debido al dolor que comenzaba a sentir.
—¿Horacio?
La voz de quien había estado esperando por más de una hora por fin había hecho presencia en aquel departamento.
Jadeó tratando de llamar la atención de su alfa que sin cuidado, abrió la puerta de la habitación y observó al moreno sobre la cama, tragando saliva mientras se acercaba con sutileza.
El sonrojo en las mejillas del omega era notorio y los labios de este siendo apresados con sus dientes era sublime a ojos del alfa que permanecía parado frente a él.
—Horacio, no quiero que...
—Viktor...—susurró mientras sentía como una nueva corriente pasaba por su estómago y se concentraba en su miembro.—hablamos de esto más de una vez... quiero esto
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Sweet little destiny 🦋 [Volkacio]
De Todo"𝘗𝘰𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘮𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘢𝘯𝘵𝘢𝘴, 𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘳𝘦𝘴 𝘮𝘪 𝘥𝘶𝘭𝘤𝘦 𝘺 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦𝘯̃𝘰 𝘥𝘦𝘴𝘵𝘪𝘯𝘰" Volkacio tinyverse X omegaverse