Hoy se realiza la cena navideña, estuve todo el día cocinando, no es que vaya a venir gente, sólo seremos mi papá y yo como cada año, pero me gusta mantener el espíritu navideño, hace unos días decoré la casa, tanto el interior como el exterior de ésta. Siempre he sido fan de la navidad, a pesar de no recibir regalos de "Santa Claus" y no pasarla en familia.
-¿No crees que hiciste mucho? -mi padre me hizo la misma pregunta de todos los años.
-Nunca es suficiente -respondí igual que todas las veces que preguntaba eso.
-Voy a llevar la comida a la mesa -se ofreció, asentí mientras terminaba de servir lo que faltaba.
Normalmente cocino comida para dos porciones, pero hago una gran variedad de cosas, lo que hace parecer que me excedo al preparar la cena de navidad. Nos sentamos y empezamos a comer, hasta que formulé una pregunta que llevaba rato rondando en mi mente.
-¿Por qué los abuelos no vienen a celebrar con nosotros? No sólo navidad, sino las fechas importantes como fin de año, o los cumpleaños, ni siquiera los mencionas -se ahogó ante mi recriminación, tomó un trago de su vino para pasar la comida y poder hablar.
-Vaya que este mes ha sido de interrogatorios eh -comentó antes de iniciar su explicación-. Verás, cuando me enamoré de tu madre, ellos no aprobaron la relación, diciendo que iba a sufrir porque ella se iba a morir, yo hice caso omiso a eso, estaba loco por esa mujer -soltó un suspiro-. Luché por lo nuestro, pero ellos no cedían, cada vez que Laura sufría un ataque, ellos estaban allí restregándomelo, y diciendo que dejara de perder el tiempo, porque iba a morir igualmente, sólo era cuestión de tiempo, igualmente los ignoré. Cuando tu madre murió, lloré como no tienes una idea, pero en vez de consolarme, sólo se burlaron. Me advitieron, me dijeron que una vez muriera no saliera corriendo a sus brazos, cosa que sucedió, pero me rechazaron. Empezaste a crecer y a preguntar por ellos, nunca logré responderte, sabía que no lo entenderías. Los trataba de contactar, pero su orgullo era tan grande que nunca quisieron conocerte por ser hija de esa persona que me rompió el alma. Nunca estuvieron interesados en ti, les insistí tanto... pero siempre rechazaban la invitación, así que llegó un punto en el que me olvidé de ellos, ni siquiera sé si siguen con vida o no, pero realmente ya no me importa, por muy cruel que suene.
Me quedé callada por un rato, sin saber que decir ante eso. Mis abuelos fueron muy crueles al ignorar así a mi padre en medio de su pérdida.
Comimos por un rato.
-Gracias otra vez, por contarme todo, ya se me quitaron las ganas de conocerlos -terminamos de comer y me levanté para recoger la mesa, mi padre me empezó a ayudar.
-No les guardes rencor, ellos tenían razón desde el principio, fue cosa mía el hacer oído sordo ante sus advertencias -se encogió de hombros.
-Pero aún así, no comprendieron que estabas enamorado, no se puede luchar contra eso, su deber como padres era estar ahí para ti sin importar la situación -repliqué, cada vez estoy odiando más a mis abuelos sin siquiera conocerlos porque su orgullo es inmenso.
-¿Pero qué se puede hacer? No pienso seguir insistiendo, eso sí sería perder el tiempo, estoy cansado de sus recriminaciones -con eso se dio por finalizada la conversación.
Subí a mi habitación, revisé mi celular y vi que tenía mensajes de Jenna, decidí llamarla.
-Hey -saludó cuando contestó, le devolví el saludo-, ¿qué tal todo?
Le conté sobre mi conversación con mi padre durante la cena, como siempre, me escuchó sin interrumpir.
-En fin, nunca estuvieron interesados en mí, así que ahora yo tampoco quiero conocerlos, ni siquiera sé sus nombres pero no me importa, siendo sincera -me encogí de hombros y me tiré en la cama, mirando el techo.
-Vaya seres sin corazón -comentó triste y con un poco de ira ante la historia.
-Tienes suerte de tener una familia unida, admiro eso, deben ser grandes las fiestas que hacen -reí sin ganas.
-Ya verás como las cosas mejorarán, tengo fe -me alentó-. Tengo que colgar, mi madre necesita ayuda con algunas cosas, te quiero, estoy emocionada porque nos veremos dentro de pocos días.
-Yo también estoy feliz, iremos dentro de 5 días, te quiero -colgué y me levanté, mi ánimo mejoró.
Bajé a la cocina y me dispuse a limpiar el desastre que hay mientras tarareaba canciones navideñas. Recibí una llamada de un número desconocido, dudé un poco pero me decidí por contestar.
-¿Buenas noches? -saludé con extrañeza. No recibí respuesta inmediata-, ¿quién es?
-¿Habla TN Torres? -preguntó la persona al otro lado de la línea, era un hombre.
-Si... ¿quién habla? -insistí al no obtener respuesta.
-Soy Christopher, tu abuelo.
ESTÁS LEYENDO
Primer Amor || Jenna Ortega x TN Fem
De TodoLa famosísima Jenna Ortega chocó conmigo en un concierto ¿Qué es lo peor que puede pasar? O bueno ¿Qué es lo mejor que puede pasar?