El Inesperado Amor De Un Angel // Adaptación Emiliaco

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Parece que hubieran pasado varios días de lo que en verdad pasaron para que Joaquín finalmente estuviera cerca de Emilio.

Había llegado finalmente el día dónde se recogerían las libretas con las 1000 firmas ó un número cercano a esa cantidad, ya los estudiantes de primer año se encontraban sentados en sus respectivas filas. Joaquín sentado en la primera fila observando a Emilio, quién estaba a unos pequeños pasos de él.

A pesar de ser consciente del beso que vió entre su senior y otra estudiante, ese no fué motivo para no alegrarse al ver a Emilio nuevamente así de cerca.

Los seniors se veían serios, ese día iban a fijarse si sus compañeros juniors podían ser capaces ó estaban dispuestos a querer pronto tener un engranaje cómo símbolo de su esfuerzo y empeño.

Emilio estaba casi seguro que la mayoría de los de primer año no habían llegado a la meta de las 1000 firmas y mucho menos Joaquín, estaba casi ó ya seguro que aquel ojimiel no tenía nada de firmas y si eso era así iba a ocasionar un castigo para sus otros compañeros.

— Estudiantes de primer año, ésta tarde y ya después de cumplirse 1 semana necesitamos que nos entreguen sus libretas y en ellas esperamos ver las 1000 firmas ó por lo menos un número cercano a ello, vamos a empezar.

Y dicho eso por parte del líder de la facultad de ingeniería, los seniors empezaron a dirigirse a los menores que sólo debían entregar las libretas, Emilio también estaba recogiendo las libretas y cuándo recogió la de Joaquín éste lo miró fijamente y fué algo raro para ambos ya que se miraron por unos segundos cómo si el tiempo se hubiera detenido, pero la realidad los hizo despertar.

Joaquín suspiró al momento de que Emilio se alejó con su libreta, pero estaba feliz ya que no debía preocuparse y Elyzabeth también estaba tranquila al momento de entregarle su libreta a Leidy, quién se sintió relajada al verla mejor, aún con marcas de los golpes, pero ya Elyzabeth estaba mucho mejor de su rodilla y Ben decidió quedarse al margen ya quizás se había pasado con Elyzabeth por lo que tuvo miedo, además que esa mañana de éste nuevo día Leudy lo había amenazado con hacer que lo expulsen de la universidad, así que decidió finalmente dejar en paz tanto a Elyzabeth cómo a Joaquín.

El conteo empezó y Emilio sólo estaba interesado en la libreta de alguien y era obviamente del ojimiel. Tenía ganas de saber si por lo menos había llenado una hoja de la libreta, pero es que sus ojos se abrieron de sorpresa al ver la libreta de Joaquín llena a pesar de que él ni sus compañeros le habían firmado.

Empezó a contar las firmas y Joaquín a lo lejos lo miraba curioso, pero con una sonrisa, Joaquín sabía cuántas firmas había obtenido, una parte por la ayuda de ese superior de medicina que ya no había vuelto a ver y la otra parte producto de su propio esfuerzo al pedir firmas a otros superiores aunque tuvo que cumplir con retos cómo bailar ridículamente, pero estaba conforme y orgulloso de él mismo por no rendirse cuándo Emili9 rompió su otra libreta.

— ¡902! ¿Cómo lo logró? — Emilio estaba muy sorprendido

Y miró a Joaquín, quién también lo estaba mirando con una sonrisa en su rostro, Emilio se mostró asombrado aún más por apreciar la sonrisa linda que Joaquín tenía.

Terminaron de contar las firmas de todas las libretas y para sorpresa de los estudiantes de tercer año, los de primer año absolutamente todos ellos habían logrado con su reto de la recolección de firmas.

— Los felicito, no negaré que nos dejaron sorprendidos por haber conseguido tantas firmas sólo espero sigan así de empeñosos con las siguientes actividades que tendremos para ustedes — dijo Emilio dirigiéndose a los menores