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Narrador omnisciente:
Manjiro Sano solía ser un gran chico, quería cambiar la visión que tenía la gente de los pandilleros y conseguir que la ToMan fuera la líder; sin embargo, ciertos hechos le marcaron más de lo que creía, dejando de ser así el buen chico que todos amaban. Cuando todo empezó a cambiar a pesar de que Draken era su mejor amigo, no estaba de acuerdo con lo que hacía y tuvo que juntarse con otra pandilla, aunque el fin de esta era ayudar a Mikey, el menor no tenía ni idea y creía que su mejor amigo le había abandonado.
Por suerte aún le quedaba ______, la chica que en secreto dirigía Valhalla y poco a poco se había ganado su confianza. Muchos pensaran que el Mikey de ahora acabaría con cualquier chica que saliese con él, y probablemente si apenas hubiesen pasado un par de años conociéndose así sería, pero a _______, hacía ya tiempo que la conocía y ella era un pequeño escape de la cruel realidad que Manjiro estaba viviendo.
Narra _______:
¿- Puedes darte prisa y apartarte de la maldita puerta Haruchiyo?- Pregunto molesta al de cabellos rosas, quién sonríe falsamente.
- Podría, pero no quiero.- Responde este burlándose, por lo que le empujó y me abro paso hacia el despacho de Mikey. Llamo a la puerta un par de veces y en cuando escucho un leve "pasa," entro a la sala. Apenas puedo divisar el leve movimiento que tienen sus labios, pero es que aunque no lo parezca Manjiro tiene una pequeña sonrisa dibujada en su rostro, aquellos que no lo conocen no se percatarian, pero yo sí.
- Se que tenéis un poco de lío ahora mismo con Bonten, pero he estado pensando que podrías venir a casa antes...
-No, no voy a dejar esto a manos de Sanzu.- Explica él.
- No sería necesario, sé que no quieres meterme en estos asuntos, però los Shunataro podrían aceptar dialogar...- Insinuo sin acabar de decir lo que tengo pensado.
- Sabes que no quiero un trato, quiero lo mejor para los chicos y bueno para nosotros.- Replica él más tranquilo de lo que me esperaba.
- Lo sé, y podemos hacer que lo entiendan. Ahora están buscando a tus trabajadores de menor status, pero que pasa si se te llevan a Koko, Ran, Rindou,...- Sigo contándole mi idea.- Solo digo que podríamos hablar con el jefe de los Shunataro y seguro que conseguiríamos un poco de paz...
- Paz, no estaría mal... Lo pensaré pero no te prometo nada.- Finaliza la conversación bastante cansado, da un golpe en su pierna indicándome que vaya, lo hago y este apoya su cabeza en mi hombro.- Quiero dormir...- Reprocha el mayor quien apenas duerme aunque es una de las cosas que más desea ahora.
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¿-Que haces en el tejado?- Pregunto a Manjiro, un poco asustada.
- No podía dormir... Estaba pensando en Emma, Sinichiro, Baji. Segun lo que la gente dice están en el cielo, observandonos... Quería observarles a ellos.- Responde con una voz bastante apagada. ¿Donde está aquel chico que conocí, que aunque tenía sueño todo el rato podía pelear o correr cualquier hora del dia?- Creo que les he defraudado...- Vuelve a explicar el de cabellos blancos. Me siento a su lado y jugueteo con su pelo.
- Estoy segura que no, aunque quizás ellos no querían este futuro para tí, ten por seguro que te quieren y te apoyan en todo a pesar de que no terminen de estar de acuerdo, al igual que yo.- Y tras decir eso, depósito un beso en su frente.
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