Cap. 42

112 7 1
                                    

Clockwork
Las horas pasan, Toby y yo seguimos esposados y sentados en la sala de interrogatorio. Un silencio incómodo es presente en esta habitación, que desaparece cuando un agente entra para iniciar con el interrogatorio.

—Bien, ¿como se llaman ustedes, jóvenes?—pregunta el agente.

—Natalie Oulette—respondo secamente.

—Tobias Rogers—contesta Toby de igual forma.

—Bien, ¿por qué mataron, o mejor dicho, por qué tú mataste, al joven Chris?—cuestiona señalándome.

—Porque él y mi familia hicieron de mi vida un infierno, por culpa de ellos he sufrido, así como me deshice de mi familia, me deshice de él, y sin duda lo volvería a hacer.—respondo tranquilamente.

—Tú, ¿quien eres?—pregunta a Toby.

—Su novio.—responde.

¿¡Novio!? Disimulo mi expresión de confusión y alegria a la vez. Toby no me lo ha pedido, pero cuanto deseo poder ser más que solo amigos.

—Mira, Natalie, el hecho que tu ex-novio te haya hecho daño, no te da el derecho para matarlo, ni a él ni a tu familia.—dice el agente. —Además, nosotros somos los únicos que pueden hacer las cosas correctas y justas.

—Su justicia es un asco, ella fue abusada por su hermano, maltratada por sus padres, y ustedes, su deber es servir y proteger, ella pidió ayuda pero "por ser una niña" no le hicieron caso. Nosotros somos la justicia, porque ustedes no son más que una organización pagada e incompetente, que son como juguetes, con una moneda se mueven, necesitan dinero para hacer su trabajo, y aun así, no lo hacen bien.—alega Toby firmemente dejándome sorprendida, se ve muy atractivo cuando se frustra.

—¿De manera que te atreves a defenderla? ¿Piensan que están en lo correcto?—cuestiona el agente incrédulo.

—No pensamos, estamos en lo correcto. Su padre lo golpeaba a él, a su madre y su hermana, él al no poder sentir el dolor lo encerraba a oscuras en una habitación, él sufrió mucho con la muerte de su hermana y también su madre puso una denuncia por violencia, pero, "por ser mujer" no la ayudaron. Y gracias a ustedes, luego de la muerte de su hermana, su madre murió a manos de su padre, él hizo justicia con sus propias manos vengando la sangre de su hermana y su madre, él hizo lo correcto, lo que ese hombre merecía—afirmo con voz de mando.

—Ambos tienen crímenes muy graves, pero como ustedes dicen, somos pagados.—el agente muestra una asquerosa sonrisa cínica. —La familia de Chris nos pagó para deshacernos de ustedes, y eso haremos. En pocos días, morirán en la silla eléctrica, por órdenes de ellos.—dicho esto, el agente hace una seña para que otros policías entren. —Llévenselos a la celda de seguridad máxima—ordena. —Les advierto, ahí hay seguridad, y es imposible que escapen, estarán en la misma celda, hablen entre ustedes y despídanse, porque en unos días, no se verán nunca mas.

Los policías sonríen cínicamente y nos llevan a Toby y a mi a la celda de máxima seguridad.

Al parecer, no tiene cámaras, ni guardias, y para colmo, nos quitaron todo lo que pudiéramos usar para escapar. Me empujan a la celda y hacen lo mismo con Toby para luego cerrarla. Los oficiales se van, dejándonos completamente solos, agarrados de las barras de nuestra prisión, mirando hacia abajo.

Me alejo de las barras y me siento en una de las camillas, empiezo a recordar todo lo que viví, y ahora por mi culpa, el amor de mi vida morirá junto a mi.

—Perdóname Toby.—digo sin levantar la vista.

—¿Que?—cuestiona confundido.

—Por mi culpa estamos aquí—las lágrimas empiezan a hacer su aparición deslizándose por mis mejillas. —Yo no debí haber nacido, no debí conocerte, si alguna de esas cosas hubiera sido nada de esto estaría pasando, yo te desgracié la vida.—digo entre sollozos.

—Clock, acércate—pide Toby alejándose de las barras

Me acerco lentamente sin levantar la mirada. Toby alcanza mis manos y las toma entre las suyas con delicadeza.

—Mírame—me pide, y le obedezco, mirándolo fijamente a sus hermosos ojos café oscuro. —Prefiero morir, que vivir mil años sin haberte conocido.—afirma secando mis lágrimas. —Lo que te pasó, no fue tu culpa, no tienes la culpa de nada, no me desgraciaste la vida, al contrario, le devolviste el sentido a mi vida.—esas palabras hacen que mi respiración se agite un poco, pero Toby acaricia mi mejilla, él sabe que eso me calma.

—¿Por qué dices eso?—cuestiono incrédula.

—Porque nunca ame tanto a alguien, y si voy a morir, quiero hacerlo junto a ti, tú misma lo dijiste, yo sufrí mucho, pero cuando te encontré, me diste un rayo de esperanza, eres la mejor chica que he conocido, y si quiero pasar mis últimos minutos con alguien, ese alguien eres tú.—ambos acercamos nuestros rostros, y unimos nuestros labios en un profundo beso, lleno de amor, de pasión, coloco mis manos en sus hombros y él pone las suyas en mi cintura. Al separarnos nos miramos fijamente.

—Pero, ¿por qué dijiste que somos novios? Nunca me lo pediste—menciono confundida.

—Porque cada que intentaba pedírtelo algo pasaba, pero ahorita lo dije porque, si vamos a morir, quiero que sea siendo novios. Así que, Clocky, ¿quieres ser mi novia?—un pequeño tic se forma en el cuello de Toby, me toma por sorpresa su propuesta. Coloco mi mano en su cuello calmando su tic.

—A pesar de lo que me pasó, ¿quieres estar conmigo?—pregunto.

—Si. Tu pasado no me impide amarte como lo hago, tuvimos relaciones fuera del noviazgo, no quiero volver a hacerlo si no eres mi novia, porque no quiero que pienses o tengas ese temor que te haré daño.—tomo a Toby del cuello de su sudadera y lo acerco a mi para besarlo nuevamente y hacer este un beso más apasionado.

—Si, Toby, quiero ser tu novia—mis palabras hacen que una sonrisa se forme en su rostro y me dé un corto beso.

En eso, el reloj de Toby empieza a sonar, no lo había notado antes, estaba bien oculto en su sudadera. Toby se sube la manga y abre el reloj mostrando una pantalla, son Masky y Hoodie.

—¡Chicos! ¿¡Que diablos pasó!? ¿Donde están? Slender nos mandó a buscarte para decirte algo pero no los encontramos. ¿Qué pasó?— pregunta Masky preocupado

—La policía nos tiene encerrados, moriremos si no vienen a salvarnos pronto—dice Toby con voz baja para evitar ser escuchado.

—¿Hay cámaras?—cuestiona Hoodie.

—Si, dile a Kate, que localice mi reloj e inspeccione esta zona para saber donde se encuentran exactamente las cámaras—pido en voz baja.

—Me les adelante—dice Kate, —Habían cuatro cámaras directo a ustedes, ya las desactivé, ahora solo queda salvarlos—afirma ella.

—Mañana, antes del mediodía estaremos ahí, los sacaremos de ese lugar.—asegura Masky.

—Los esperaremos—afirmamos Toby y yo.

—Cambio y fuera—dice Hoodie y Toby cierra su reloj.

—No había visto ese reloj antes—comento.

—Slender los diseño solo para los Proxys, para prevenir este tipo de situaciones.—responde cubriendo el reloj. —Debo decir, que el ambiente de aquí me da muchas ideas—menciona Toby.

—¿Por ejemplo?—pregunto confundida.

—Te traigo muchas ganas—sus palabras hacen que me sonroje y sienta algo de calentura.

—Estás malditas barras nos impiden todo.—digo decepcionada.

—No todo, hay mucho que podemos hacer—Toby toma mi rostro y comienza a besarme salvajemente. No me opongo y le sigo el beso. —Después de todo, estamos en una misma celda, y las cámaras están desactivadas.

Sanando tu corazón-Ticciwork Donde viven las historias. Descúbrelo ahora