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El silencio era el que abrazaba el ambiente y lo único que nos abrazaba era el canto de las aves, pronto la cornucopia se presentó frente a nosotros, nos manteníamos cubiertos por los árboles y arbustos para no exponernos, en una mesa había cuatro bolsas con los números de los distritos en ellas, podía ver los distritos que seguían en pie, el dos, Cato y Clove, el 5 la pelirroja, el once, Thresh y el doce, Seth y yo.

Avancé decidida a ir por nuestra bolsa cuando una figura apareció corriendo, aquella chica pelirroja tomó su bolsa y salió de ahí a gran velocidad, el venir aquí era un gran riesgo para ella, ya que no llevaba armas.

Una vez que se perdió en el bosque regresé mi vista a las bolsas y sin dudarlo corrí por la nuestra, la tomé y corrí por el lado izquierdo de la cornucopia, mi mirada fue hacia mi derecha donde pude ver a Clove segundos antes de que lanzara uno de sus cuchillos y me hiciera un corte en la mejilla haciéndome caer al suelo debido que intenté esquivar el arma.

Me levanté tomando una de mis flechas para colocarla y apuntar en su dirección pero cuando la solté ella la esquivó como si no fuera nada, tomé otra flecha y justo cuando disparé ella se lanzó contra mi, esquivando esa segunda flecha de alguna forma.

Rodamos en el suelo antes de poder separarnos, ella corrió en mi dirección para derribarme una segunda vez quedando sobre mí para inmovilizarme. Sacó uno de sus cuchillos con la intención de acabar conmigo pero coloqué mis manos en sus muñecas evitando sus movimientos, colocó todo su peso en el cuchillo así que empujé su rostro rápidamente para desubicarla pero se repuso. Su cuchillo fue a gran velocidad hacia mi rostro el cual hice a un lado viendo como hundía en el mismo en el pasto debajo de mi.

Intenté quitarla de mi pero era imposible era muy ágil, le di un golpe en el pómulo derecho pero parecía no tener efecto en ella, comencé a perder control de mi cuerpo, ella estaba inmovilizando cada extremidad.

— ¡Seth! — grité como único recurso.

— Oh... ¿tú enamorado?, Cato está acabando con él seguramente — río — ay ya entendí, tú querías salvarlo, ¿no? ay que tierna — su cuchillo se colocó en mi garganta sin hacer presión — lástima que no pudiste salvar a tu... amiguita, la niñita, ¿cómo se llamaba? ¿Rue? —

Forcejeé con rabia — no te atrevas a decir su nombre una vez más — escupí.

— ¿O qué? ¿vas a matarme? — rió — no creo que estés en situación de amenazar a quién tiene el cuchillo en tu maldita garganta, doce — presionó la cuchilla un poco más — Sí, la matamos y ahora te mataremos a ti y a tu estúpido compañero — sacó otra navaja más pequeña que la que tenía en mi cuello, la colocó en mi mejilla antes de comenzar a subir su mano para matarme con aquella navaja del tamaño de mi palma.

Antes de poder bajarla directamente a mi cara una mano la detuvo y tiraron de ella, era Thresh, la tomó de la ropa para estamparla contra la cornucopia con rabia.

— ¿La asesinaron? — preguntó tomándola del cuello mientras Clove comenzaba a llorar.

— No — negaba casi gritando mientras intentaba quitar la mano de Thresh de su cuello. Él negó.

— Te escuché — presionó a Clove contra la cornucopia.

— ¡Cato! — gritó ella.

— Dijiste su nombre — le gritó en la cara mientras la veía con rabia.

— ¡Cato! — gritó de vuelta.

—¡Dijiste su nombre! — después de gritarle eso la tomó para comenzar a estrellar su cuerpo contra la superficie plateada de la cornucopia, una y otra vez.

POUR YOUR HEART OUT |1 - THE HUNGER GAMES -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora