Cercana Seducción (COMPLETA)

#17

Vladimir

—apresúrate -digo a Alexander-

—Dios mío amigo, hay chicas muy hermosas en New York -dice sonriendo-

—más tarde tendremos tiempo para eso, ahora sube a la jodida camioneta.

Alexander sube a mi lado, el chofer comienza a conducir al departamento de mi querida hermanita.

—¿que harás cuando la veas? -pregunta-

—nada, solo haremos como si no la conociéramos, porque eso es, no la conocemos, es una amiga nueva de Hera -explicó y Alex asiente-

—bien entonces, ¿estas seguro de que no le lloraras en cuanto la veas? -habla riendo y rodeó los ojos-

—no Alexander, no le lloraré -digo y ambos reímos-

—tenemos que salir de club esta noche -dice frotando las palmas de sus manos y asiento-

—claro que si -digo seguro-

—¿cuánto nos quedaremos? -pregunta mientras toma el iPod-

—una semana -digo sin más y veo a Alex abrir los ojos como plato-

—¿una semana? ¿Quien te crees, hermano? -pregunta y lo observo-

—el jefe de la empresa, hermano -digo obvio-

—cierto -dice riendo-

Observo por la ventana de la camioneta, nos acercamos a las calles principales de New York, falta poco para llegar a aquel departamento.

—quiero ver a tu hermana -dice Alex y lo fulmino con la mirada-

—cuidado, Alexander -digo serio y el rie-

—eres idiota, quiero ver la cara que pondrá tu hermana al verte, no le avisaste sobre tu visita -dice tranquilo-

—claro, también ansió ver sus caras -digo sonriendo levemente-

—hemos llegado, señor James -dice el chofer-

Salimos de la camioneta, Alexander y yo entramos al edificio, pasamos a recepción, una chica rubia nos sonríe amable y Alex, alias el coqueto, sonríe y se prepara para hablar.

—buenas tardes señorita, venimos a visitar a la señorita James Watson -habla tranquilo-

—¿usted es? -pregunta la chica-

—hermano -hablo yo- y el es mi amigo

—muy bien, piso cinco, departamento doscientos seis -habla sonriendo- al fondo está el elevador.

—Gracias, guapa -dice Alex haciendo sonrojar a la rubia-

Sonrió al ver sus coqueteos y caminamos al elevador, óptimo el quinto botón y esperamos a que el elevador se detenga, las puertas se abren y observamos el largo pasillo, salimos del elevador y comenzamos a caminar... 200...204... ¡bingo! 206.

Alex y yo nos observamos, sonreímos maliciosos y tocó la puerta, al principio no hay respuesta pero luego escucho la voz de la castaña gritando "ya voy".

La puerta se abre, ¡sorpresa Laurens!. Su cara es un gran espectáculo, realmente se muestra nerviosa y sorprendida, pero según ella, logra disimularlo sonriendo nerviosamente.

—hola, ¿buscan a alguien? -pregunta-

—¿está aquí Hera? -pregunto de lo más tranquilo- es mi hermana

—claro, esperen un momento, iré a hablarle -dice y cierra la puerta de nuevo-

Alex y yo sonreímos.