Eternamente Tuya (#3) (Completa)

Capítulo 52: La oficina de Florian (Parte I)

Actualización 2/2

Capítulo 52: La oficina de Florian (Parte I)

—Llegó la prometida del señor Rutter. —dijo Dominik al verme en la recepción principal.

No quise replicarle, solo sonreí un poco fingiendo estar de buen humor, temiendo que me reprendieran por llegar tarde.

—Ingeniera Queen —dijo la recepcionista—, el señor Rutter dijo que al llegar lo fuera a ver a su Oficina.

«Ay mierda».

Realmente lo último que quería era ver a Florian ahora, temía no saber qué responderle si me preguntaba qué había ocurrido en el club anoche, es decir, discutieron, casi se fueron a los golpes y yo me fui con Hades.

De seguro me iba a despedir, ni siquiera disfruté que me hubieran llamado por primera vez "ingeniera Queen".

—Vale, gracias —dije continuando mi camino hacia los ascensores, mi corazón estaba acelerado y mi respiración caótica.

Ahora temía seriamente que por culpa de Hades y de mis hormonas alborotadas perdiera mi primer trabajo serio.

La idea de pedir traslado a la sucursal de mi país sonaba cada vez más tentadora, es decir, amaba Países Bajos, pero... nada como estar en mi tierra con mi cultura, extrañaba demasiado todo.

Llamé al ascensor y cuando las puerta se abrieron vi que ahí estaba Taylor; el mejor amigo de Hades que venía saliendo, apenas me vio, me ofreció una ligera sonrisa.

—Hola, Nube, buenos días.

—Taylor —sonreí, él empezó a caminar pero dije:— ¿vas con Hades?

Se detuvo y pareció dudar un poco, finalmente me miró pareciendo de repente serio cuando contestó:

—Es mejor... —dijo— que no te involucres en esto, Nube.

Fruncí el ceño.

Como no, su mejor amigo era su cómplice y todos querían mantenerme ajena.

—Vale —fingí una sonrisa y me subí al ascensor fingiendo estar bien, pero solo esperé a que las puertas del ascensor se cerraran frente a mí para congelar mi rostro lleno de frustración.

Así recordaba que se sentía estar con Hades, algo estresante, algo despechado e inseguro, estar con Hades era saltar a ciegas, sin paracaídas y estrellarse.

Algo en mi seguía sintiendo cosas por él, pero si no cambiaba no tenía por qué seguir resistiendo esto, no lo merecía. Confiaba en él, sabía que jamás me traicionaría, pero... no lo tenía por completo, tenía la mitad de Hades y eso no lo iba a tolerar.

Maldita sea, ¿cómo era que después de una noche tan fantástica todo se pudo ir a la mierda?

«Calmate Nube, solo respira».

Estaba que botaba chispas, pero ahora tenía que relajarme si iba a ir a la oficina de Florian sin saber qué era lo que iba a encontrarme.

Cuando las puertas del ascensor se abrieron me dirigí a la oficina del ingeniero Charlie Green para notificarle que había llegado, para después ir a la de Florian a enfrentarme a lo que quisiera hablar conmigo.

No iba a mentir.

Tenía miedo.

El ingeniero Charlie estaba justamente abriendo la oficina, vaya, al parecer habíamos llegamos al mismo tiempo.

—Hola Nube ¿cómo estas? —dijo el ingeniero Charlie cuando me acerqué y notó mi presencia.

—Bien —dije—, ¿acaba de llegar?