Ofensiva
—Llevaremos la lucha hasta ellos —dije, y obtuve cinco miradas de extrañeza.
Jinyoung, Minho, Seungmin, Christopher y Hyunjin estaban frente a mí. A ninguno de ellos le agradaba mi propuesta; les había pedido que acudieran al Salón Bélico para discutir mi plan, pero hasta ese momento yo era el único que había hablado.
—¿Y esa es tu gran idea? —preguntó Hyunjin con aire ligeramente divertido; con todo, era la respuesta más positiva que recibía—. ¿Que nos maten allí en lugar de aquí?
—La idea es que no nos maten —dije, y me apoyé en la mesa que estaba detrás de mí.
—Bien, pues si eso es lo que quieres hacer, Felix, yo te apoyo —dijo Seungmin, aunque sonaba reticente—. Pero no sé hasta qué punto podrá servirnos. Los Vittra tendrán la ventaja de estar en su territorio.
—Hyunjin conoce el palacio Vittra —dije señalándolo. Hizo una mueca cuando lo propuse como guía —. Así los sorprenderemos. Christopher sobrevivió a los duendes porque usó la misma estrategia.
—Pero fue un milagro, príncipe —me recordó Christopher—. Además, en realidad no contamos precisamente con el factor sorpresa: los Vittra están a punto de venir aquí a invadir nuestro reino. En cuanto se enteren de tu ascenso al trono, saldrán de Ondarike.
—Por eso tenemos que trasladarnos ahora —dije.
—¿Ahora? —preguntaron Christopher y Seungmin al unísono, conmocionados.
—Sí —asentí—. He dado órdenes para que la coronación sea en dos horas. Mi primera orden como monarca será declarar la guerra a los Vittra. Iremos a por ellos, los atacaremos y ganaremos.
—¿Quieres sorprenderlos hoy? —preguntó Minho.
—Sí, mientras duermen —expliqué—. Será el mejor momento.
—No sé si eso será posible, príncipe. —Jinyoung negó con la cabeza—. No podemos planear un ataque a gran escala en unas cuantas horas.
—En cuanto el rey se entere de que he sido coronado, estará aquí fuera con un ejército de duendes. —Señalé la puerta para dar peso a mi afirmación—. Estamos hablando de sólo unos días. ¿Qué más podemos hacer entre hoy y pasado mañana que sea mejor que atacar a los Vittra sin que lo esperen?
—No lo sé —admitió Jinyoung—, pero eso no significa que debamos embarcarnos en una misión suicida.
—¿Suicidio, dice? —cuestioné—. Usted mismo vio la pintura, su hijo aparece muerto en ella. Todos los aquí presentes, excepto usted, estamos muertos. —Hice una pausa para dejarlo reflexionar—. Tenemos que hacer algo para modificar ese resultado.
—Atacar el palacio Vittra sólo nos permitirá encontrar la muerte en otro sitio —dijo Christopher.
—Puede ser —asentí—, pero ¿y qué? He leído muchos libros de historia de los Trylle, ¿y sabes lo que se dice en todos ellos? Que siempre accedemos, esperamos, eludimos, nos defendemos; los Trylle nunca nos hemos levantado a pelear de verdad, por nosotros.
»Ha llegado el momento de hacerlo —continué—. Es nuestra última oportunidad: no sólo nosotros, los que estamos en este salón, sino todo el reino; si no lo hacemos ahora, seremos conquistados.
—Es una pena —dijo Seungmin afligido.
—¿Qué? —pregunté.
—Que hayas dado este discurso ahora en lugar de reservarlo para ayudarme a convencer a los markis y a las marksinnas de ir a luchar con nosotros esta noche —dijo Seungmin.
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3.Renacimiento - Hyunlix/Chanlix
FantasyEl destino de Felix parece estar sellado. Se avecina una guerra y todo lo que ha sacrificado para conseguir la paz y el equilibrio del pueblo Trylle pende de un hilo. Los acontecimientos se precipitan y lo encaminan hacia un final inesperado. ¿Conse...