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Sólo tú y yo"

Cuando la noche cayó, finalmente los chicos salieron de la casa que habíamos rentado para pasar las vacaciones en las Maldivas, lo cual se me hizo completamente extraño.

—Por fin nos dejaron solos. — susurró Tom.

—Por suerte, realmente estaba estresada. — reí.

Tom tomó mi mano y prácticamente me arrastró hacia el primer piso, específicamente hacia el comedor.

Una vez que llegamos ví todo completamente oscuro a excepción de la mesa, la cual estaba alumbrada por velas y había todo tipo de comida sobre ella, incluso una botella de champagne estaba en el centro.

—¿En qué momento hiciste todo esto, Tom? Ni siquiera hemos salido de la habitación. — hablé cruzándome de brazos.

—Lo hicieron las mucamas cuando estabas peleando con Matthew. — simplemente se encogió de hombros, restándole importancia.

Me dirigió hacia una silla, la cual una vez me senté, recorrió hacia la mesa y seguido, él también se sentó.

—¿Te he dicho que eres preciosa? — susurró y puso su mano en mi barbilla, jalándome hacía él para poder besarme.

—Somos más de peleas que de cosas cursis, de hecho. — bromee a lo que él soltó una risa.

—Lo sé. . Y realmente siento todo lo que te he hecho pasar, pero ahora quiero comenzar una nueva vida a tu lado, no importa si tengo que soportar el resto de mi vida a tus amigos con complejo de niños pequeños. —

—¿Lo dices en serio? — pregunté aún sin creer una sola palabra que salía de su boca.

Él abrió la botella de champagne para así poder servir las copas, me dió una de las copas y él bebió de su copa en cuanto terminó.

—Yo viviría y mataría por ti, si pudiera sacaría mi corazón y te lo daría para que solamente tú lo tuvieras eternamente. —

—No hay una sola cosa que no haría por ti y sé que ahora y después, la única chica que quiero a mi lado eres tú, mi futura esposa. —

No pude evitar que mis mejillas tomaran un color carmín, así que decidí ignorar las palabras y me límite a comer.

No era que no lo amara, no. Creo que él más que nadie sabía que incluso si no decía una sola palabra a su declaración, yo lo amaba, lo adoraba realmente.

Seguimos comiendo tranquilamente, en un silencio cómodo, no necesitábamos hablar en ese momento y realmente anhelaba más momentos así, igual de tranquilos.

Y no era que me molestara pasar el tiempo con los chicos, pero amaba más el silencio y agradecía que Tom lo supiera.

—¿Realmente no quieres tener hijos? — preguntó de repente, de acuerdo, esa pregunta sí me tomó por sorpresa.

—No es que no quiera. . Solamente aún no he pensado lo suficientemente en eso y por ahora veo más importantes otras cosas que tener hijos. — respondí con sinceridad.

Él asintió y por un momento ví como su estado de ánimo cayó, pero era verdad.

Recién estábamos comprometidos, no debíamos apresurar más las cosas de lo que ya lo habíamos hecho ¿no?

***

—Es tan linda la luna. — susurré.

Después de la tranquila cena decidimos regresar a la habitación y observar la hermosa noche desde el balcón, como una típica pareja enamorada.

—Es casi tan hermosa como tú. — habló contra mi oído lo que hizo que un escalofrío recorriera mi cuerpo.

Apretó más sus manos contra mis caderas y apegó su pelvis contra mi, pude sentir su hombría erecta contra mis muslos.

—Tom, aquí no, alguien podría vernos. — me giré, viéndolo directamente a la cara.

—¿Hmm? No creo que nadie nos vea, los únicos idiotas y molestos que podrían arruinar nuestro momento, ya no están aquí, entonces ¿quién podría vernos?

—¿Y si regresan? Sabes que Devon te matará si nos ve. —

—Tranquila, tengo un acuerdo con ellos, ellos no interrumpirán esta noche y yo no les partiré la cara. —

—Eres un idiota. —reí.

—Probablemente lo sea, pero soy tu idiota, de nadie más. —

De repente me cargó entre sus brazos, haciendo que por inercia aferrara mis piernas a sus costados, él por su parte repartía besos a lo largo de mi cuello y pechos aún cubiertos por mi ropa.

Caminó hasta estar cerca de la cama, donde me dejó caer con cuidado y seguido de eso se quitó la camisa, dejándome ver su cuerpo perfectamente trabajado y esa típica forma de v bien marcada.

—¿Te gusta lo que ves? — dijo y al darle cuenta de que había pasado demasiado tiempo para mi gusto viéndolo, me sonrojé y desvíe mi mirada de su tentador cuerpo.

—Has visto tantas veces mi cuerpo y aún así sigues actuando como si fueras tímida. — se burló.

—Cierra la boca antes de que te la cierre, Kaulitz. — refunfuñé fingiendo desagrado.

—¿Ah, sí? ¿y cómo piensas hacerlo? Niñita. — me retó y lo pude ver por la forma en la que me veía, colocó ambas manos a mis costados, prácticamente aprisionándome contra el colchón y él.

—Yo creo que con un golpe es más que suficiente para que cierres tu insufrible boca. — escupí.

Tom se abalanzó contra mis labios, uniéndolos en un beso salvaje, rudo y por supuesto, muy lejos de ser inocente.

Me recosté sobre la cama dejándome llevar por el momento y él poco a poco se fué subiendo sobre mi.

Comenzó a subir mi blusa por mis manos y yo alcé las manos, ayudándolo a deshacerse más rápidamente de aquella prenda.

Poco a poco la demás ropa comenzaba q estorbar y la temperatura en la habitación comenzaba a subir.

con un Tom besando, mordiendo y succionando cada parte de mi cuerpo, era realmente difícil mantener la compostura.

Él sabía que era mi debilidad y se aprovechaba de eso.

Incluso estaba segura de que recordaba cada punto débil de mi cuerpo a la perfección.

En un ágil movimiento también se deshizo de mi sostén, dejándome solamente con mi short puesto.

Siguió bajando sus besos hasta llegar a mi abdomen en el cual dejó un beso antes de sacar su lengua y comenzar a subir, lamiendo parte de mi estómago y deteniéndose en medio de mis senos.

———————

Y ni modo, aquí se quedó el capítulo.

En el próximo completaré el +18 y probablemente lo suba en un rato, más en la noche o mañana, no lo sé.

Lxs quiero. <3

𝐒𝐭𝐮𝐩𝐢𝐝 𝐛𝐨𝐲┆ Tom kaulitz +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora