Capítulo 12

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Naruto estaba por tocar, apretó el ceño pensando ¿qué demonios hacía ahí? -no sabes si hacerlo, ¿no es así? -Itachi sintió molestia nuevamente, ¿acaso seguía pensando en su hermano? -simplemente no sé qué hago aquí -el Uchiha lo vio con seriedad -son tus amigos y están preocupados por ti -el rubio giró sus azules hacia el mayor, mordió su mejilla con ansiedad, recordó como Sasuke lo había salvado del otsutsuki y como Sakura a pesar de todo se preocupaba por él, sobó su nuca, tocó con fastidio -Sakura abrió la puerta -Narutooo -el rubio sonrió forzado al sentir el abrazo de la chica -¿qué demonios sucede? entren -el Hokage la siguió con Itachi a su lado -esa maldita gente dice estupideces, ¿qué significa todo eso?, casi golpeo a una chica, ¿cómo se atreven? -Naruto sonrió ligero, Itachi tenía razón, estaban preocupados -tch deja al dobe, debe tener suficiente de esa mierda diario, Sarada, ya llegaron-

Naruto respiró con fastidio -son mentiras obviamente, déjalos que digan lo que quieran -Sarada escuchó con cuidado, Boruto aseguraba que eran verdad -yo sabía que era así, esas son estupideces, deberías encontrar al culpable y hacerlo pagar -el rubio negó -no, no quiero que indague la gente en lo que en verdad sucedió, no quiero que afecten a mis hijos con entrevistas o preguntas estúpidas, prefiero que piensen lo que quieran -la pequeña Uchiha los veía con cuidado mientras ayudaba a su madre a traer las cosas -Boruto está seguro que tiene una amante Hokage-sama -el silencio cubrió el lugar, el rubio apretó el ceño ligeramente, negó con fastidio -supongo que siempre me ha tenido en un bajo concepto, es desgastante querer hablar o aclarar las cosas con la pared, no te preocupes pequeña -Sarada sonrió más tranquila.

Itachi apretó el ceño con molestia ante la situación -no deberías estar pagando por pecados ajenos -susurró al rubio, el Uzumaki sonrió ligero al mayor -mientras mi gente cercana sepa quién soy, es suficiente -Itachi sonrió ligero, la familia los vio murmurar con confianza -¿son vecinos ahora?, me dijo Sasuke -el Uchiha asintió -vivimos en el mismo edificio, está cerca de la torre y la base -Naruto sonrió -me consiguió el departamento cuando se dio cuenta que vivía en mi oficina -Sakura sonrió divertida -no cambias Naruto, dale prioridad a tu vida, como dice Shikamaru, rubio problemático -el Uzumaki sonrió con diversión -es verdad dobe, siempre está primero el resto del mundo para ti -el rubio se avergonzó, rascó su nuca avergonzado. Sarada sonrió con emoción al ver la humildad de su kage. Naruto se sintió en familia una vez más y ese sentimiento le agradó. Itachi por un momento lo observó agrandándole lo que veía, esa sonrisa era una sonrisa sincera.

…..

Itachi iba llegando al edificio de departamentos cuando vio salir al Uzumaki siendo sigiloso y cauto, sin pensarlo comenzó a seguirlo entre los techos, lo vio adquirir un henge y entrar al barrio rojo, era sábado, desde el techo lo observó conseguir a un chico y entrar con él a un hotel, apretó el ceño con molestia, apretó sus puños con coraje -tch maldita sea -ese sentimiento de molestia volvía a él, veía el edificio sin poder ver al interior de la habitación, había un jutsu de privacidad, apretó su mandíbula con coraje, quería sacarlo de ahí, marcarlo y hacerlo suyo, abrió sus ojos con sorpresa al caer en cuenta de sus pensamientos, bajó su mirada con frustración, salió del lugar hacia su departamento, por horas observó el techo del lugar pensando en lo que había visto.

Por la madrugada escuchó la puerta del departamento del Uzumaki -demonios otra vez, cambiaré la maldita chapa -el Uchiha escuchó cómo entró en el lugar, no había pasado la noche con ese sujeto, él también había pagado por ese tipo de servicios, no podía quejarse, una vez más recordó esa última vez que lo hizo, nunca había escogido a una chica rubia, apretó el ceño al recordar cómo se había puesto al final cuando imaginó que era el Uzumaki, se sentó observando la pared frente a su cama algo perdido, al recordar esa imagen se había puesto caliente -debería darme una ducha susurró, estaba por levantarse cuando algo llamó su atención, un pequeño rayo de luz se dejó ver en la pared, su departamento estaba oscuro y el rayo de luz era evidente, parpadeó con duda, se acercó con curiosidad, vió un poco, el Uzumaki entraba a la tina completamente desnudo, sus onix se abrieron demasiado al verlo de esa manera, se retiró un poco al verlo acercarse al pequeño agujero -se cayó el papel, demonios -el rubio colocó papel en el lugar, quería evitar invadir la privacidad del Uchiha.

Itachi volvió a acostarse recordando esa imagen, había visto todo tan claramente, había observado con velocidad hasta el último detalle, era hermoso, mordió su mejilla, era obvio que le gustaba el Uzumaki bastante, lo deseaba. Con ese pensamiento en mente metió su mano en su pantalón y comenzó a tocarse suavemente recordando lo que había visto, su miembro evidentemente estaba bastante duro, recordó como imaginó que le realizaba una felación, apretó el ceño recordando como se había liberado con tanta fuerza, la pequeña luz una vez más fue visible en su cuarto oscuro, sonrió arrogante al darse cuenta que lo espiaba, bajó su pantalón liberando su enorme miembro haciéndolo visible para el rubio, su mano subía y bajaba con velocidad. El Uzumaki hizo exactamente lo mismo, la saliva podía caer de su boca al verlo de esa manera, era hermoso el Uchiha, sus azules se abrieron un poco más al verlo liberarse y gemir -mhnnn -el hokage cerró sus ojos y de igual forma se liberó, tragó pesado al darse cuenta que lo había vuelto a espiar, lo vio levantarse al baño con su miembro de fuera un poco duro aún, lamió sus labios, cuando regresó sólo traía su ropa interior el azabache, lo vió acostarse sin dejar mucho a la imaginación. Itachi con el filo de su mirada vio una gema azul observarlo con deseo, estaba satisfecho, se acomodó, con más tranquilidad se dejó observar, le agradaba su atención y el sentir que lo deseaba.

Regalo (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora