Regalo (Itanaru)

Capítulo 22

Himawari corría con sus peluches con emoción.. abrió sus gemas enormes -kyaaaaaaaa es hermosa -entró con velocidad a la casa, comenzó a girar en el salón donde iría la sala -es genial papi -Naruto sonrió -tu habitación es la segunda cariño, traemos los muebles, en un momento los clones arreglaran todo.. -la pequeña asintió, corrió con emoción. Naruto invocó a diez clones mientras Itachi sólo a dos, los clones comenzaron con las habilitaciones, el rubio salió al jardín viendo con emoción el lugar -es increíble -Itachi sonrió al verlo feliz, lo rodeó de la cintura con una mano -es increíble, nuestro hogar -Naruto sonrió con cariño, besó su mejilla suavemente -te amo -el Uchiha giró su mirada, sonrió -también te amo -besaron sus labios con cariño -papiiiii, esto es increíble, es hermoso todo -se lanzó al pasto en el jardín con una gran sonrisa -¿hablarás con mamá para poder quedarme los fines de semana? -Naruto asintió -el contrato de divorcio estipulaba que cuando quisieran pasar la noche o el fin de semana conmigo, era su decisión, simplemente le avisaré, aún tenemos algunas cosas que comprar, ¿te parece si nos acompañas y seleccionas la ropa de cama y algo de ropa para que tengas en tu habitación? -Hima asintió -puede haber un peluche de Shukaku-san y otro de kurama-ji -Naruto sonrió con diversión -sólo no lo digas tan fuerte o te escucharán -los tres rieron.

El Uzumaki negó con fastidio al sentir un chakra conocido -el Raikage, desgraciado, no me avisó -Itachi apretó el ceño -anbu no me ha avisado de su llegada -el rubio negó -llegarán en menos de una hora ¿podrías llevar a Hima? -el Uchiha asintió -enviaré a un clon a organizar la llegada de Darui-sama -Naruto asintió, se colocó su capa -lo lamento pequeña, prometo que para la cena estaré aquí, ¿te parece si me sorprendes con tu habitación? -Hima sonrió con cariño -si papi, ve con cuidado -el rubio salió con velocidad, Himawari tomó la mano de Itachi, el azabache sonrió -vayamos, cuéntame, ¿tienes un plan para tu habitación? -la pequeña asintió -me gusta mucho el amarillo y el rosa-

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Naruto caminaba con fastidio al barrio Hyuga, al llegar un par de guardias lo detuvieron -permítanos un momento Hokage-sama -el rubio asintió -quiero hablar con Hiashi-san -uno de los guardias salió con velocidad a avisar al líder Hyuga, momentos después lo guiaron a la sala de reuniones del líder -Naruto -el rubio sonrió suavemente b-gracias por recibirme Hiashi-san -el azabache sonrió ligero -¿a qué debo tu visita? -el Uzumaki se sentó con más calma al verlo tranquilo -hace unos días me mudé, conseguí una casa y quisiera que Himawari pasara conmigo los fines de semana, los días que ella guste estar, sé que a Boruto no le interesa, por lo que le agradecería mucho que me permitiera hacer esto con Hima -Hiashi asintió -es tu hija, no tienes porqué pedir permiso, además, el contrato lo manifesta -Naruto sonrió.. -le agradezco -Hiashi lo vio con cuidado -¿supongo que quieres que le avise a Hinata y evitar el enfrentamiento? -el hokage asintió -se ha vuelto imposible para mí hablar con ella, es mejor así -el líder Hyuga asintió -sé de qué hablas, al parecer no era quien creía que era, lamento todo esto, yo hablaré con ella -el hokage agradeció, salió del lugar -guardia -un Hyuga llegó -busca a mi hija Hinata, dile que me urge hablar con ella -el guardia salió con velocidad.

Después de un tiempo la ex señora Uzumaki llegó al complejo -¿qué sucede padre?, ¿para qué me hizo venir? -el anciano la vio con cuidado sentarse y tomar un poco de té -Naruto estuvo aquí -la Hyuga apretó el ceño con molestia -según el contrato matrimonial tiene derecho a que los fines de semana los niños se queden con él, además de los días que ellos se quieran quedar entre semana -Hinata negó -no, mis hijos no se alejarán de mi lado -Hiashi negó -no hay manera de interponerse Hinata, es su derecho, Himawari irá los fines de semana a su casa y tú no harás nada para impedirlo, ya suficiente le debo con guardar silencio sobre tus acciones como para todavía negarme a ayudarlo en algo que se acordó legalmente y que firmaste -Hinata bajó el rostro con coraje -son mis hijos, padre-

El susurro apenas se había escuchado, levantó el rostro con coraje -son mis hijos, no dejaré que me los quité -gritó, Hiashi apretó el ceño con molestia, la puerta se abrió -déjate de estupideces Hinata, ya suficiente hiciste con envenenar la cabeza de mi sobrino idiota o ya se te olvidó quien destruyó ese matrimonio con su infidelidad fuiste tú -Hanabi sabía que Boruto había seguido a su madre cuando su abuelo la mandó llamar -en lugar de agradecer a Naruto que haya asumido la culpa por ese divorcio, te protegió maldita sea -la Hyuga comenzó a llorar -cállate, tú no sabes lo que me hizo pasar con sus ausencias -Hanabi sonrió con sorna -tan dolida estabas que en lugar de arreglar las cosas, fuiste y te conseguiste un amante, no digas estupideces, él te era fiel, era un buen padre aunque no quieras admitirlo, siempre ha estado pendiente de sus hijos, nunca les ha faltado nada ¿atención?, es el maldito Hokage, siempre supiste su sueño, todo el mundo sabía lo demandante del puesto, sabías que esto podía ocurrir, aún así jurabas que tú amor era suficiente -Hinata golpeó el suelo en un berrinche -eres mi hermana, ¿por qué lo defiendes... padre?, ¿porqué le das la razón?, se supone son mi familia-

Hiashi se cansó -porque no tienes la razón Hinata, no la tienes, siempre estuviste encaprichada, lo espiabas, lo seguías por todos lados, caías en la locura, pusiste tu vida en riesgo en más de una ocasión y en una de esas ocasiones, Neji dio su vida por ti. Naruto no te amaba y te aferraste a él, cuando por fin lograste tu objetivo, no hice más, pero yo traté de advertirte maldita sea -Boruto lloraba con tristeza, bajó su rostro y salió del lugar con velocidad -Himawari irá los fines de semana y punto, uno de nuestros guardias la llevará a la torre el viernes por la tarde y ahí mismo la recogerá el domingo por la noche, ni se te ocurra decirle nada a Himawari, ella no tiene la culpa de nada -Hinata lloraba sintiéndose traicionada, no escuchaba razones.

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Boruto estaba acostado en su habitación viendo el techo con frustración. Himawari se asomó, lo vió triste, se acercó -¿te encuentras bien anikii? -el rubio sonrió ligero -supongo -la pequeña se sentó en su cama -¿extrañas a papá? -Boruto no respondió, lamió sus labios, preguntó con algo de vergüenza -¿pregunta por mí? -Himawari sonrió linda -siempre que nos vemos pregunta por ti, te extraña -Boruto sonrió ligero -¿crees que me perdone por ser idiota? -la pequeña sonrió -yo pienso que sí, papá es bueno -el mayor la vio con cuidado -¿qué piensas de mamá? -Himawari lo vio con cuidado, se puso seria -pienso que no es felíz, pero nadie tiene la culpa de ello, algún día encontrará a alguien que la haga realmente feliz, debemos ser pacientes-

Boruto analizaba sus palabras -¿sabes la verdad detrás del divorcio? -Himawari lo vio con cuidado, bajó su mirada pensando qué decir -mamá dice que papá nos dejó de amar, pero eso es mentira, nos ama a nosotros, su relación terminó y está dolida, supongo por eso dijo eso -el Uzumaki mayor la veía con sorpresa -eres más madura que yo, eso debería ser al revés, creo -Hima sonrió con diversión -Itachi-san dice lo mismo -el rubio la vio con cuidado -¿de quién hablas? -la pequeña mordió su mejilla con duda -es el hermano de tío Sasuke, es muy buena persona, es amigo de papá -Boruto apretó el ceño, abrió sus ojos con sorpresa al recordar al anbu de aquel día, tragó pesado -me regañó cuando me porté idiota con papá -Hima sonrió divertida -te lo merecías anikii, ¿quieres que hable con papá para que te busque? -Boruto negó -no, después habló yo con él-