Eres mi misión

7.

Kate.

Despierto por primera vez en días de un buen sueño siento un calor enorme a pesar de estar únicamente tapada con una sábana ligera.

Sigo abrazando a mi t/n, yo creo que por eso siento ése calor enorme, lo de anoche sin duda fué magnífico lo volvería a repetir sin duda alguna, a menos que ella quiera, porque de querer, yo si quiero.

La pego más a mi cuerpo y reparto besos en su nuca cuello y espalda lo cuál hace que se despierte.

- Me haces cosquillas Kate.- su voz ronca me estremece se da vuelta y nos miramos a los ojos, me quedo embelesada viendo su nariz perfilada sus labios ligeramente gruesos intentando esbozar una sonrisa, sus ojos cafés que me hacen soñar, sin duda alguna tuve suerte de tenerla conmigo.

- Es hora de levantarse t/n, muero de hambre.- le sugiero mientras hundo mi nariz en su pelo respirando su dulce aroma a jazmín.

- Y yo de sueño.- se queja y me pega más a su cuello, aprovecho para besarla en el mismo. Ella suspira y estoy casi segura de que tiene los ojos cerrados.

- Vamos t/n.- le susurro. - Quiero salir un rato.- salgo de mi escondite.

Enreda mi cuello con sus brazos.

- Está bien, tú ganas.- gira en la cama y me deja debajo de ella y me da un pequeño beso en los labios y se levanta.

Me quedo embobada mirando su trasero, por Dios su cuerpo es espectacular verla sin ropa es la mejor vista que pueda tener en Santa Mónica.

Sale del baño y comienza a vestirse, únicamente se pone los calzones y una bata ligera.

- Se te va a caer la baba Kate.- me doy cuenta de que sigo en mi burbuja llamada t/n.

Me levanto de la cama y me voy al baño a hacer mis necesidades y lavarme los dientes.

Termino y de igual manera me pongo únicamente la ropa interior y una bata y bajo a la cocina donde t/n ya está preparando el desayuno.

- Éso se ve delicioso.- le digo abrazándola por detrás.

- Ya lo tuviste anoche pero si quieres repetir por mi está bien.- siento como pega su trasero más a mi cuerpo y yo sin duda estoy roja como un tomate.

- Me refería al desayuno t/n.- le digo en voz baja.

- ¡Ah sí! También me refería a éso claro que sí. ¡Puta madre!.- con el poco español que he aprendido estoy seguro de que maldijo o no sé.

Me separo de ella y le ayudo a poner la mesa. Minutos después ella sirve el desayuno y comemos en un cómodo silencio que termina una vez que acabamos de comer.

Después nos ponemos algo de ropa y nos vamos a distraer un rato caminando por la costa.

- ¿Crees que ella vuelva?.- le pregunto mientras descansamos sobre la arena.

- No lo creo, y de verdad espero que no lo haga, aunque se vió convencida de dejarte en paz.- contesta mientras mira al frente.

- Tengo mucho miedo t/n.- abrazo a mi mejor amiga.

- También yo tengo miedo Kate, por eso decidí, que si ésa mujer vuelve, tú te irás sin ver atrás.- puedo notar que t/n habla muy enserio.

- No t/n no te quiero perder por favor no hagas ninguna locura.- le suplico.

- No tengo otra opción Kate. Te amo, y te voy a proteger con mi vida.- pega sus labios con los míos. - Vamos a descansar Kate.-

Subimos a la camioneta y vamos de regreso en el camino puedo notar que un carro nos sigue desde que arrancamos.