8. 𝑁𝑜 𝑠𝑜𝑦 𝑢𝑛𝑎 𝑧𝑜𝑟𝑟𝑎...

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—...y me caí por ver a un pájaro peleando con el cabello de la mujer.

No evito contener mi carcajada al recordar lo distraída que fui, fue una secuencia que me gustaría grabar, me detengo al notar a mi amigo mirarme hastiado, sin ningún indicio de risa.

¿Qué le sucede?

—Ya es la segunda vez que te ríes incontroladamente y todavía no me dices que hacia ese chico aquí.

Maldición...¿Por qué es así?

¿Incontroladamente? El señor Kim se toma muy a pecho el papel de adulto porque desde que llegó y nos pilló infraganti a Jiseo y a mi, no salieron más que preguntas disparadas de su boca enfatizando ese momento bochornoso. Nunca vi un rostro tan severo como el suyo. Mi compañero de universidad –alias nuevo amante– estaba completamente afligido, tuvo que irse sonrojado de mi departamento. Era notable que la mirada de mi vecino le produjo desazón.

¿Cómo es que entró directamente al departamento?

Fui tan estúpida de aceptar la propuesta de mi amigo, nosotros fuimos a crear copias de las llaves de cada uno por si da el caso de que algo malo suceda en el departamento del otro. Por supuesto que creí que fue una buena idea, en ese entonces, no imaginé que volvería a meter a un hombre que no sea Jin Ho. Aunque el nombrado ya no se hacía aparición en mi apartamento.

De todos modos, esto es molesto. No necesito un interrogatorio, debo decirle que desde ahora quiero más privacidad y que toque la puerta.

—Es Jiseo, mi compañero de la universidad, con el que tengo que hacer el trabajo de rodaje.

—¿Y porqué estaban en la cocina? Tengo entendido que un trabajo de filmación se hace en un cierto lugar y se edita en tu estudio.

Frunzo el entrecejo.

—Perdón, Taehyun. ¿Esto es un interrogatorio? Creo que tenemos que establecer unos límites...

No aguantaré su mal carácter. Esta bien, es mi amigo pero eso no le da derecho a entrometerse en lo que hago o no.

—Lo siento, Bella. Yo solo pregunto, como tienes un tiempo con Jin Ho...

—Terminamos. –Me mira atónito y prosigo—. Él tuvo una relación con otra mujer a mis espaldas, yo lo hubiera entendido si me lo comentaba antes...

Veo mis pies, impares, uno con la sandalia marrón y otro sin ella. Mi tobillo está más inflamado.

—Yo... lo lamento, pero tengo que ser honesto contigo si soy tu amigo. Terminaste con él y no es el mejor momento para que conozcas o quieras acostarte con otro hombre.

Un momento. ¿Dijo acostarse con otro hombre?

–No es lo que tu piensas...

Él está realmente enojado y no se porque se pone de tal modo.

—No me mientas Bella, pude notar la tensión sexual en el aire. Si no aparecía en ese momento seguro estarían teniendo sexo por todo tu departamento.

Oh si, no negaba que la tensión sexual nos rodeaba, sin embargo, me descoloca su imaginación. Soy una mujer y humana, si cometo un error va ser por mi propia y libre decisión. No cometeré infidelidad, ahora estoy sola.

—Bueno si, no lo voy a negar porque es verdad. ¿Y que? Ya discutimos una vez en el club sólo porque un chico trato de bailar conmigo. ¿Lo recuerdas? Ya no tengo una relación, puedo hacer lo que quiera.

Se levanta abruptamente de la silla ocasionando el temblor de la mesa. Su gesto me deja congelada, nunca me dedico una mirada de completo disgusto.

—Bien perfecto, haz lo que quieras. Yo solo te doy un consejo para que no te lastimen y que tampoco te rebajes al nivel de una...

𝑇𝑟𝑖𝑝𝑙𝑒 𝑂 | 𝚁𝙴𝚃𝚁𝙾𝚄𝚅𝙰𝙸𝙻𝙻𝙴𝚂 𝙸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora