-𝐓𝐞 𝐍𝐞𝐜𝐞𝐬𝐢𝐭𝐨- (Quackity X Tú)

1. Mi razón de odiarlo

_____(tú):

— Chinga tu madre. — murmuró enojado y se fue.

¿Que le pasa a este idiota? Si supiera que se a la perfección el español, mejor dicho que soy mexicana tanto como él es mexicano. No quise responder, no pienso desgastarme en una persona como Alexis Maldonado.

Lo vi alejarse en su auto y por fin hice lo que tanto quería.

— ¡Ahg! Estúpido Alexis — no me importaba en lo más mínimo la gente que va pasando se me quedé viendo — ¡Hay si!, soy streamer y tengo muchos seguidores, me creo super gracioso ja ja ja — dije imitando su voz —. Idiota, idiota, idiota.

Terminé dando saltos en mi lugar, estoy que me lleva, no puedo más. No quiero volver a verlo en todo mi vida a ese pinche greñudo. ¿Quién se creé? ¿El rey del mundo? Yo simplemente ya no puedo compartir la misma universidad que él, ni el mismo país de nacimiento, ni donde nos encontramos actualmente, ni siquiera el mismo aire.

Empecé a respirar profundamente, me fui relajado poco a poco, mi psicóloga ya me dijo que tengo que aguantar la respiración del uno al diez, hasta que me relaje, y eso hago. Subí a mi camioneta y emprendí camino a casa de mi padre, no voy arruinar mi día por Alexis Maldonado.

[...]

Alexis/Quackity:

— Me tiene harto, mamá — bufé.

— Debes guardar la calma, hijo. — contarle a mi mamá lo que me pasa y escucharla me alivia todos mis problemas.

— Se creé demasiado solo porqué su padre es uno de los mejores abogados de aquí. — mencioné un tanto frustrado y enojado.

Hoy en la mañana tuvimos una práctica y es muy buena en esto, no lo puedo negar. Llega a creerse la mejor en todo solo por su papi, se pone el puto puesto de su padre, le costó a su papá no a ella. Suficiente tengo con aguantarla ya mucho tiempo, tenemos cierta rivalidad. Pinche gringa.

— Tú hacías lo mismo en la primaria, en todas las clases solo querías hablar del trabajo de tu padre. — es que mi mamá está en contra mía.

— No, eh. Iba en la primaria, ahorita ya estamos hablando de otra etapa. — sentí correr lo caliente por mi rostro.

— Tienes razón, solo ignorarla y ya. Lo que pasa es que no puede creer que alguien tan bueno como tú llegues a quitarle el trono, así que olvida esto; ahora tengo que dejarte porque se me queman los frijoles, adiós mijo. — termino de despedirse y colgó.

Tiene razón mi madre, no está soportando que yo llegue a su miserable vida, ya no le tomare importancia, no es una persona que merezca estar en mis pensamientos y que esté hablando de ella. Ya no más.

.
.

— Se creé un chingo la pinche morra, amigos. Si la conocieran no la podrían soportar ni un segundo más. — dije desahogando me con mi chat.

Al instante me llegó una donación.

quack_quack: Ya no le ponga importancia a esa, es el mejor rey.

Sonreí por la donación.

— Exacto, y no está soportando que yo sea el mejor. — me encogí de hombros con una sonrisa de oreja a oreja.

Seguí hablando un poco más y jugué con Roier, no me pude contener y hablé de eso.

— Oye, Quackity. — dijo con cierta curiosidad en su voz.

— ¿Que pasó pá? — pregunté.

— Ya entendí que es muy caga palo, pero, ¿Es guapa? — mi sonrisa decayó al escuchar a Roier.

Quitando de lado su pinche ego, carácter y más, si es guapa... muy guapa a decir verdad, hoy se veía muy bien, vestía unos jeans y una sudadera beige, algo casual. Aunque cuando va formal es mucho más guapa, la hace ver tan segura, mandona como me gust... ¡Puta madre! No debería estar pensando así de ella.

— Está bien, está normal. — dije sin mucho interés.

— ¿Normal? ¿Cómo es eso, wey? — volvió a preguntar.

— Pues norm.— me interrumpió una donación que llamo demasiado mi atención.

Atole_de_choco: Tanto dice odiarla y no puede evitar hablar de ella, recuerde que los que se caen mal se gustan, Lic.

— ¿Quackity? — escuchar la voz de Roier me hizo volver a la realidad.

— Pues está bien, ya no quiero hablar más de ella. — está niñita hace que me salga de mis putas casillas.

— Okey, hablemos de otra cosa. — recomendó al instante.

No quiero seguir pensando más en ella, sin embargo no puedo evitarlo, tanto la odió que abunda en mis pensamientos, trató de evitar hablar de ella, de pensar, de fijarme hasta en lo más mínimo que hace pero por más que lo evite no puedo, es como una adicción.

Y por eso mismo es otra razón de odiarla.

[...]

______(tú):

— No quiero escucharte hablar sobre el greñudo ese. — me miró mal mi padre, y vaya que lo entiendo a la perfección.

— No iba hacerlo, ¿Por qué hablaría de una persona sin importancia? — mire hacia otra dirección.

— Exacto, no hay ni una. Recuerda quién eres, quienes somos y lo que valemos, recuerda nuestro legando. Mi pequeña oruga. — palmeó mi hombro sonriendo.

No hablamos más como de costumbre, solo nos dedicamos a degustar nuestros platillos. De lo único que hablamos fue sobre casos, casos y más casos; cómo va el buffet de abogados y ya. Por lo menos hoy me preguntó si me había gustado la comida, un gran avance.

Cada semana me tocaba por lo menos venir a comer con él, mis padres están divorciados y amo a los dos, pero no puedo vivir bien con ni uno de ellos. Al cumplir los 18 le pedí el único capricho que he tenido en toda mi vida, o sueño, mejor dicho, un apartamento, no quiero vivir con ningún de los dos, parecen perros y gatos, no había día que no me preguntará por el otro, a veces llegó a pensar que se siguen amando como para estar al tanto del otro.
Quedamos que por lo menos una vez a la semana comiera con ellos, ya aunque sea para convivir un rato. Otra es que mi padre no quiera hacerlo y solo gastemos este día hablando del arduo trabajo que tiene como uno de los mejores abogados; si fuera por mi me hubiera ido de aquí hace mucho tiempo, y por supuesto hubiera estudiado lo que más quería en el mundo, eso es gastronomía, pero una vez más he complacido a mi padre.

En cambio con mi madre, ella sabe lo que amo, lo que me hubiera gustado estudiar y a qué dedicarme realmente; solo que es muy complicado estar con ella también, nuestras conversaciones terminan hablando de mi padre, un tanto estresante. Ahí es cuando se agrega una a más a la lista:

Mi razón de odiarlo:

• Alex si estudia lo que quiere, lo que le apasiona.

Al igual que tengo una lista de cosas que admiro de él:

Mi razón de admirarlo:

• Logra lo que se propone sin importar qué.

.
.
.

Holaaaa, ¿Cómo están? ¿Que les pareció?. Esta idea se me ocurrió lavando los platos, después de tanto pensar ocurrió y ¡Pum! aquí la tienen, cuídense mucho.
Se les ama.
Byeeee.💗