➢ JK 용서 - 03

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Jimin

Koo tenía razón. Esta fue una muy mala idea. Simplemente no sabía cómo reunirlo con Namjoon sin llevarlo a la casa club. Koo sabía cosas que nosotros no, claramente. Cosas que necesitábamos saber. No tenía intención de pasar los siguientes veinte años de mi vida tras las rejas porque no sabía algo.

Esta vez, cuando me subí a mi motocicleta, hice que Koo se subiera detrás de mí. No solo no era seguro viajar con él delante de mí, sino que el viento soplaba su hedor de regreso a mí. Parecía un poco vacilante cuando envolvió sus brazos alrededor de mi cintura hasta que los agarré y los coloqué donde deberían ir.

Tendría que quemar esta ropa después de esto.

—Agárrate fuerte.

Los brazos alrededor de mi cintura se apretaron.

Moví la palanca de cambios con la punta de mi bota y luego guié mi motocicleta de regreso a la carretera. La casa club no estaba tan lejos del almacén. Solo un par de millas. Eso me hizo preguntarme si Koo caminaba la distancia entre este vecindario y el mío regularmente o si tenía un lugar más cerca de la casa club. Tendría que preguntarle sobre eso.

No encontramos ningún problema en el camino a la sede del club.

Me detuve frente al lugar, luego lo pensé mejor y conduje mi motocicleta hasta el garaje en la parte de atrás. Quería que Seokjin le echara un vistazo antes de volver a conducirla y asegurarme de que todo estaba bien. Nadie conocía las motocicletas mejor que él.

Apagué mi motocicleta y luego extendí mi brazo para que Koo pudiera usarlo para bajar.

—Bájate, Koo.

Koo no se movió por un momento, luego se bajó lentamente. Él no usó mi brazo en absoluto, así que lo dejé caer a mi lado y me bajé de la motocicleta. Escaneé el área y luego me dirigí a la puerta trasera.

Hice una pausa antes de abrir la puerta y le envié a Namjoon un mensaje de texto rápido informándole que estaba allí y que estaba llevando a Koo directamente a su oficina. No se sentía bien hacer pasar a Koo por la sala principal. Simplemente no entendía por qué me sentía así.

—Vamos, Koo, —le dije mientras abría la puerta y entraba en la parte trasera del club. El club se dividió en dos secciones separadas. El frente de la casa club era un bar que todos los miembros y posibles clientes podían frecuentar y traer a sus amigos. La parte posterior de la casa club era solo para miembros, a menos que alguien estuviera acompañado por un miembro parcheado.

Koo encajaba en esa categoría.

Lo conduje por el pasillo hasta la oficina de Namjoon. El hombre nos estaba esperando, sentado detrás de su escritorio, con una cerveza en una mano y un cigarro en la otra. Sus ojos se abrieron un poco cuando vio a Koo. No podría decir que lo culpé. Koo tenía un aspecto bastante raído. Olía aún peor.

Namjoon tosió antes de tomar un sorbo de su cerveza y luego dejarla sobre el escritorio.

—Jimin.

Asentí rápidamente antes de señalar al hombre acurrucado detrás de mí. Era un poco gracioso tomando en cuenta que era alto, sin embargo, se agachaba y, de alguna manera, eso lo hizo parecer más pequeño, más indefenso.

—Este es Koo. Koo, este es Namjoon, el presidente de Soldiers of Fortune MC.

Koo se asomó y saludó antes de esconderse rápidamente detrás de mí una vez más. Namjoon se rio entre dientes cuando rodé los ojos. Agarré el brazo de Koo y lo saqué para que se pusiera delante de mí. Agité mi mano hacia una de las sillas al otro lado del escritorio de Namjoon.

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