CAPITULO DIECISIETE

1.4K 128 7
                                    

CAPÍTULO DIECISIETE
CELOS

CAPÍTULO DIECISIETECELOS

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

DICIEMBRE 25, 1942

Era el 25 de diciembre de 1942 o como a todo el mundo le gusta llamarlo Navidad. Era una mañana temprana en la que todo el mundo corría alegremente por los pasillos. Caía nieve blanca del cielo al suelo. El viento se levantó rápidamente y las ventanas se enfriaron al tacto. Pequeños copos de nieve caían del cielo lentamente uno a uno mientras yo los veía bailar a través de la ventana del salón.

Mientras estaba junto a la ventana viendo la nieve bailar ante mis ojos, todos en la casa detrás de mí sonreían y reían de alegría por el día que era. Un gran árbol de Navidad de verdad de color verde esmeralda se erguía orgulloso en un rincón de la habitación. De las ramas colgaba la guirnalda plateada, adornos de diferentes formas, colores y tamaños se alzaban orgullosos en el árbol, y una hermosa estrella de color amarillo dorado se posaba en la punta del árbol brillando de alegría.

Giré la cabeza para ver a los niños, Emma, Olive y Victor, jugar alrededor del árbol de Navidad e intenté adivinar qué les habían regalado. Mis ojos verdes se posaron de algún modo en un niño moreno sentado en un sillón con el ceño fruncido. Observé disimuladamente a Enoch por el rabillo del ojo durante un segundo para ver si se le escapaba una sonrisa.

Pero sin suerte, el chico testarudo y gruñón seguía con el ceño fruncido sin interés y se puso a jugar con su figura de arcilla. Puse los ojos en blanco ante el comportamiento de Enoch y volví a centrar mi atención en Víctor. Cuando mis ojos verdes se posaron en Víctor, se iluminaron al instante y empecé a sonreír suavemente. Víctor estaba sentado en el suelo con Bronwyn, intentando encontrar regalos con su nombre. Luego ambos intentaban adivinar qué había dentro agitando suavemente la caja, lo que hacía sonreír a Bronwyn.

No entendía en absoluto por qué Enoch tenía que ser como era y ser tan grosero con todo el mundo. Era un deprimente y siempre empezaba algo pensando que podría ser lo correcto. Me sacudí esos pensamientos de la cabeza y empecé a reunirme con todos junto al árbol de Navidad.

Charlie y Millard correteaban por la casa con Horace sentado en otro de los sofás mientras los regañaba de vez en cuando. Fiona y Hugh observaban la nieve caer junto a la ventana con sonrisas de alegría en sus rostros. Los gemelos estaban sentados con Olive y Emma junto al árbol, haciendo ruiditos cuando encontraban un regalo bajo el árbol que iba dirigido a ellos. Claire estaba sentada en mi regazo mientras nos sentábamos en el sofá más cercano al árbol con Bronwyn y Victor sentados a nuestros pies.

—¡Muy bien niños, aléjense del árbol, aún no es hora de abrir sus regalos!—Anunció la señorita Peregrine entró en la habitación y comenzó a asegurar a los niños decepcionados lejos del árbol.

Miré a Claire que parecía un poco decepcionada haciéndome hacerle cosquillas a lo que ella soltó una risita. Me levanté levantando a Claire y poniéndola en mi cadera y al hacerlo, sentí un par de ojos suaves sobre mí. Levanté la vista de Claire y vi a Víctor mirándonos a Claire y a mí con una dulce sonrisa. Cuando sus ojos se cruzaron con los míos, no pude evitar sonrojarme y bajar la mirada, lo que hizo que Víctor se riera un poco.

𝐒𝐍𝐎𝐖 𝐖𝐇𝐈𝐓𝐄 | ᵉⁿᵒᶜʰ ᵒ'ᶜᵒⁿⁿᵒʳ ✗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora