C. Y suspiro.

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Encuentro cierta paz en la rutina

en la certeza,

la seguridad de lo estable,

pero a veces, temo tanto

tanto

mi futuro,

temo el ver pasar aquí todas mis horas,

mis días, mis años,

mis daños.

Temo encontrarme a mí misma

diariamente

repitiendo las mismas palabras,

los mismos gestos,

las mismas acciones,

esperando a que me den indicaciones,

que el reloj marque las ocho en punto

y salga la última factura de la noche.

Y es fácil

decir que me veo en esto durante toda una vida

¿Pero qué tan fácil es soportarlo?

¿Qué tan fácil es seguir los pasos sin equivocarte

y salir invicta después de cada jornada?

¿Qué tan fácil es reprimir el llanto,

apretar los dientes y morderse la lengua

cuando ves el rostro de la prepotencia?

¿Qué tan fácil es saber que lo que te conviene

no es lo que siempre esperaste de tí?

(Suspiro)

Me aliviaría creer

que esto es solo una parada

y no el lugar de destino,

sin embargo,

sigo estando en la mejor parada,

así que ¿Qué caso tendría seguir avanzando?

¿Por qué habría de buscar otro camino?

La ambición...

la ambición jamás me llevó a ningún lado,

solo me estrelló la cara contra el piso

y ahora me creen una niña,

me toman de conformista,

en el mejor de los casos me consideran

una buena hija,

una no demasiado lista.

(Suspiro, otra vez)

Puedes soñar

siempre y cuando no olvides despertarte;

nunca has de apuntar a lo alto,

es más fácil recoger de los frutos caídos

que trepar el árbol.

¿Y qué sería de mí

si jamás hubiera aprendido a escribir?

¿Qué sería de mí

si mis lágrimas no fuesen versos recitados

y mi resignación no fuera un poema

escrito a medias en el papel

de una caja registradora

durante el trabajo?

Solo una obrera

ajena a sus propios pensamientos

exhausta, suspirando.


Junio 17, 2023.

Mariposas de Sueño y Café.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora