—Luke, ¿de verdad ves necesario comprar todo esto?— preguntó Lizzy, mientras caminábamos por los pasillos de la tienda.—Lizz, ¿de verdad ves necesario salir con mi hermano?— replicó él, empujando un carrito con varias cajas enormes.
Ella me miró poniendo los ojos en blanco y yo solo me encogí de hombros, divertido por la situación.
—Lo digo en serio. Hay cosas que te puedo pasar, ¿pero la bici de unicornios es necesaria?
—Pues claro que sí, querida cuñada. Le prometí a Abby que sería yo quien enseñaría a montar en bici a Emma— sonrió orgulloso.
—Vale, ¿y qué me dices del coche rosa en miniatura?
—Eso ha sido idea de Axel.
—Oye, perdona que te diga, pero va a ser la más chula de todos sus amigos teniendo un coche— dije yo.
—Collins, la niña tiene un mes de vida— Lizzy parecía agotada de la conversación.
—Un mes y ocho días, perdona.
—Aún así no sabe hacer otra cosa que no sea dormir y comer.
—Bueno, pues ya la enseñaremos cuando crezca.
Nos dirigimos a la caja a pagar todas las cosas para la bebé (no hace falta aclarar que pagó Luke) y después decidimos ir a una cafetería del centro comercial.
Cuando mis dos amigos se acercaron a la barra a pedir, no pude evitar acordarme de que apenas había hablado con mi novio los últimos días.
Desde que habíamos vuelto de la playa notaba que intentaba evitarme y que estaba distante. No sabía muy bien que hacer ante esto. Lo único que hacía era quedarme despierto hasta las tantas de la madrugada, preguntándome si había hecho algo mal.
Nos vimos cuando quedamos para celebrar el primer mes de Emma, pero todo se notaba algo distinto. Era raro.
Suspiré cuando Luke y Lizzy volvieron a la mesa con los pedidos.
—Por Dios, ¿nos quieres contar ya lo que te pasa con Shelton?— me dijo ella, revolviendo su café con la pajita.
—Eso, bro. Somos tus mejores amigos, desahógate con nosotros— la siguió Luke.
—Pues... no sé... Sinceramente ni yo sé lo que pasa. Le noto como... distante.
—Habla con él— zanjó Lizzy enseguida.
—No es tan fácil.
—Claro que sí. Yo veo que Shelton en el fondo te quiere, Axel. Todos lo vemos. Y os veo capaces de arreglarlo— sonrió ella.
Luke asintió repetidas veces con la cabeza, dándole la razón.
—Mmh, vale. Lo intentaré.
—De puta madre. Ahora, hablemos de Luna y Holden...— dijo Luke dándole un sorbo a su bebida.
***
—Y por eso, Speak Now es el mejor álbum de Taylor Swift— terminó él, una hora después, mientras iba sentado a mi lado en el coche.
—De eso nada, el mejor es Folklore— replicó Lizz desde el asiento de delante, con Lucas conduciendo a su lado.
El pobre yo creo que ya había aprendido a ignorarnos y simplemente mirar a la carretera
—Más quisieras. ¿Tú qué opinas, Collins?
—Eeehh... Yo apenas conozco canciones de Taylor, no me metáis en esto— negué con la cabeza. —Deberíais preguntarle a Laia, que ella también es fan.
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Gay Panic
RomanceAxel y Henry son mejores amigos. ¿Qué pasará cuando se den cuenta de que sienten cosas el uno por el otro? ¿Tendrán el valor suficiente para amar?