𝟭𝟱: 𝐃𝐄𝐀𝐓𝐇 𝐁𝐘 𝐀 𝐓𝐇𝐎𝐔𝐒𝐀𝐍𝐃 𝐂𝐔𝐓𝐒

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You said it was a great love
One for the ages
But if the story's over
Why am I still writing pages?






11 de Mayo, 2023.

Londres, Inglaterra.




Los primeros días fueron los más difíciles, pensaba que tendría que lidear con la ruptura y la publicación de las fotos al mismo tiempo, para su buena suerte, no fue así. Esperó uno, dos, tres días y las infames fotos nunca se publicaron, Romina no sabía si debía tomarlo como una victoria o no.



Tal vez había sido suerte el hecho de que los rumores se hubieran apagado de un día para otro, le parecía una mala broma del destino, tan cruel como graciosa. Una parte de ella quería arrepentirse de haberse permitido sentir todo lo que había guardado, pero cada que cerraba los ojos podía ver la sonrisa del piloto de Ferrari justo antes de besarla.



Una lágrima silenciosa cayó por su mejilla, se mordió el labio inferior para contenerse. Habían pasado días y  ya estaba cansada de llorar por Carlos. Roscoe notó su cambio de humor y no tardó en acomodarse a su lado, empujando su cabeza contra el regazo de la mexicana para llamar su atención, la actriz lo acarició de buena gana.




Lewis tocó la puerta antes de entrar, su mirada cargada de preocupación estaba fija en su mejor amiga. Estaban siendo días complicados para Romina y el inglés sabía que si no fuera porque aún tenía grabaciones en la ciudad, volvería a su país para ver a su familia. Por ese motivo, le había prometido a Sergio que cuidaría de su hermana, que estaría ahí para apoyarla.





───Estoy bien. ───la mexicana se apresuró a explicar, mientras el mayor acercaba su mano a su mejilla para limpiar la lágrima que había caído.



───Está bien si no lo estás, Rome. Llevas años queriendo a Carlos y esto pasa... es lógico que duela. ───la actriz se abalanzó para abrazarlo y Hamilton la recibió con un abrazo, acariciando su cabello mientras sentía su camisa empaparse de las lágrimas.



───Ya no quiero sentirme así, debería estar feliz porque mi carrera ya no corre peligro. ───sobrevivió a los terribles primeros días después de la ruptura, aun no se recuperaba del todo y cualquier mención al español lograba que se le encogiera el corazón.


¿Cómo podía olvidarlo?, no se había atrevido a quitarse el relicario que Sainz le regaló. Creía que era la única prueba que tenía de que realmente la había querido y no había sido parte de uno de sus sueños más descabellados. Tal vez algún día se armaría de valor y tiraría el regalo de Carlos, se despojaría de la última prueba de su amor.



───Tiempo, eso es todo lo que necesitas. Sé comprensiva contigo misma, dejarás de sentirte así. ───estaba convencido de eso, la había visto levantarse más de una vez y por más que el amor que la mexicana sentía por el español era inmenso, Romina podía con eso y más.


───Tienes razón, saldré adelante. ───se separó de su amigo, dedicándole una débil sonrisa. No se sentía así, no se imaginaba un mundo en el que Carlos dejase de importarle, había perdido un novio y a uno de sus mas grandes amigos. Lo quería en su vida.


Lewis tenía razón, día tras día el dolor se convertía más llevadero, podía ver noticias del piloto de Ferrari sin soltarse a llorar, podía pensar en él sin revivir la última conversación que tuvieron. Se enfocó en el trabajo, en sus grabaciones pendiente y ese contrato que Madison había logrado conservar y le aseguraba que sería el mejor papel que hará.


Un consejo de amor | Carlos Sainz + Max VerstappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora