One-Shots || Lookism-Hit Viral

Munseong Kim

Mis golpes resonaban por todo el lugar. El saco se movía de un lado a otro por los puños y patadas que daba.

Las gotas de sudor caían por mi frente, el pecho y la espalda.

Solté un grito para dar mi último y más fuerte golpe, haciendo que el saco se moviera bruscamente.

Era horrible tener está sensación.

Nunca me ha importado cuidar del todo mi apariencia por los demás, pero el hecho de que el chico que me gusta... Ni si quiera me vea como una mujer, era realmente deprimente.

— ¿Estás enojada? —una voz que reconocía muy bien me sacó de mis pensamientos.

— Para nada, Munseong.

No le dirigí la mirada y seguí con lo mío.

Eso hasta que la persona que menos quería ver, se paró en frente mío, parando mis golpes.

— Nunca he sido bueno con las palabras.

— Lo sé. —me alejé un poco.

— Cuando dije que no te veía de esa for...

— No importa, estás en tu derecho de rechazarme.

— No es eso.

Suspiré y fui al ring, subí y con una seña le dije que viniera conmigo.

— Entrenemos.

Él suspiró y subió, no se puso los guantes... Solo que quedó quieto, esperando que yo comenzara.

Aunque normalmente él era más suave conmigo, me enojó un poco que ahora ni siquiera intentara dar un golpe.

Hoy se limitaba a esquivar, y era realmente estresante el hecho de que lo hiciera tan bien.

No le daba ni uno.

Y eso me enojaba mucho más.

— No me gusta Bomi. —movió la cabeza, evitando exitosamente mi guante.

Al escuchar su nombre solté un golpe mucho más fuerte, pero este nuevamente rozó su mejilla. Él aprovechó para tomar mi brazo y acercarme un poco a su cuerpo.

Hice fuerza en mis piernas para no caer en su pecho, que creo que es lo que Munseong quería.

— No soy bueno con las palabras.

— ¡Ya dijiste eso! —hice una vuelta al ver que estaba en buena posición para pegar un codazo.

Pero antes de que pudiera dar la vuelta completa, tomó mi cintura y me pegó a su espalda.

— ¡En el boxeo no se puede tomar de la cintura!

— Yo entreno MMA.

— Nunca te he visto hacer esto con otro. —me zafé de su agarre y volví a mi posición.

— Estás haciendo las cosas más difíciles de lo que ya son.

— ¿Yo? ¿Ahora es mi culpa?

Y no pude más. Bajé los brazos y me quité los guantes para luego colgarmelos en el brazo.

— No me gusta Bomi.

— Me confesé a tí, y como no me respondiste, lo tomé como un rechazo. —susurré— Está bien.

— No está bien, no me dejas terminar.

— Dijiste en frente de todos que te gustaba una chica.

— ¿Y cómo sabes que no eres tú?

— Porque ya me habrías correspondido.

Bajé del ring y le sonreí de vuelta.

— No es tan fácil.

— Lo es. —finalicé, saliendo del lugar.

Porque él nunca se decidió, nunca fui su primera opción... Tampoco estuve cerca de serlo.

Siempre fue Bomi... Y cuando yo estaba por rendirme, él volvía a mí. Quería mi atención y que yo siempre estuviera para él. Siempre que me iba, me buscaba. Me confesaba, y quedaba todo en el aire.

Bomi. No importa cuánto lo intentara, solo tenía ojos para ella, pero supongo que también vivía de mi atención y afecto hacia él.

Ya no más.

Hoy, decidí dejar de querer a Munseong Kim.

Hoy... Me puse a mí por delante, hoy empezaría a quererme.

— ¿En serio vas a dejarme así? Sabes que no es mi intención.

— Munseong, podemos seguir siendo amigos —quité suavemente su brazo, el cual me había retenido para que no siguiera caminando.

— No me gusta Bomi. —repitió.

— Pero yo tampoco. —le dí un pequeño puño en el pecho, un gesto que hacía con él— y ahora, tú tampoco me gustas.

— ¿Eso es todo? ¿Dejar de quererme es tan... Fácil?

— Eso es todo. —finalicé con una pequeña sonrisa, aguantando las lágrimas— Así de fácil.