Venga, vamos ─Chifuyu apenas había entrado por la puerta de su cuarto cuando Baji ya le estaba señalando que volviera a salir.─¿Dónde? Tengo un info-vídeo de casa.
Chifuyu alzó el pequeño y rectangular proyector holográfico de un solo uso que le había llegado en el correo. La Academia era famosa por tomarse su tiempo para entregar el correo de casa a los cadetes, así que no estaba sorprendido de que fuera el primero que hubiese recibido. No estaba exactamente nostálgico; le habían pasado tantas cosas extrañas desde que dejó la Tierra que no había habido tiempo para eso, pero estaba ansioso por ver las caras familiares de sus padres y amigos.
─Puede esperar.
Baji ya estaba saliendo por la puerta.
─Maldita sea. Está bien.
Arrojó el paquete sobre la cama y lo siguió a regañadientes, mientras Baji recorría con pasos largos el estrecho corredor de metal. Adelantaron a algunos otros cadetes, pero la mayoría de ellos ya se habían retirado para la noche. Faltaba sólo una hora para que se apagaran las luces y los estudiantes de La Academia eran fuertemente alentados a estar en sus habitaciones estudiando a esa hora.
─¿Sabes qué día es hoy? ─preguntó Baji, sin mirarlo mientras le hablaba.
─No. ¿Cuál? ─Chifuyu alargó su propio paso para alcanzar a su alto compañero─. Bueno, ¿cuál? ─preguntó de nuevo cuando Baji no contestó inmediatamente.
El cadete mayor le dirigió una mirada de soslayo y una sonrisa sin humor. ─Es el aniversario de nuestra tercera semana. ¿Sabes lo qué eso significa?
En el pasado, probablemente habría protestado contra su compañero por el uso de la palabra relacionada con una relación, "aniversario", pero ahora tan sólo le frunció el ceño a Baji.
─No, ¿debería? ¿Es algún tipo de fecha especial en lo que concierne a los Needlers?
Baji ladró una risa.
─Difícilmente. Significa que sólo tenemos una semana más hasta que realmente
obtengamos nuestro Needle. Dentro de una semana a esta hora, estaremos en la oscuridad profunda.
─La próxima semana a esta hora ─repitió Chifuyu, dejando que el pensamiento
penetrara en él. Por supuesto que sabía que los días estaban pasando, pero estaba
avergonzado de admitir que había estado pensando menos en su meta final de lo que
debería haber hecho. Por supuesto que había estado ligeramente distraído por las
confusas emociones que su alto compañero le provocaba durante lo que se había
convertido en su nueva rutina.
Después de cenar, normalmente iban al campo de tiro de los Needlers durante un
par de horas y practicaban en el simulador. Como siempre, Baji murmuraba en su oído
y se apretaba contra él, pero ahora diariamente desabrochaba el uniforme de Chifuyu y recorría con sus largos dedos su pecho y abdomen hasta acariciar su polla. Nunca dejaba a Chifuyu correrse, no durante la práctica, de cualquier modo, pero a pesar de eso, Chifuyu se percató de que algo extraño estaba pasando. Las manos de su compañero en su cuerpo, más que desviar sus disparos, centrados en los objetivos, los mejoraban en realidad. No sabía cómo era posible, pero era verdad. Nunca disparó tan bien o acertó tantos objetivos como cuando los largos dedos de Baji estaban acariciando su dolorida verga con esa caricia lenta y casi casual. Baji le hablaba sobre ángulos de orientación y de las especificaciones del Needle en esos momentos, sin mencionar nunca lo que estaba pasando por debajo de la cintura de Chifuyu, pero sin detener tampoco la lenta y deliciosa tortura. Las puntuaciones de Chifuyu aumentaban continuamente y, de hecho, durante la semana pasada había alcanzado en dos ocasiones la puntuación perfecta.
