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La tarde estaba tranquila, nublada y hacía frío, pero bastante agradable para los miembros de BTS, quienes no habían tenido ensayo por las malas condiciones de su sala de ensayo.
— Me encantan estos días, solo estar en casa, totalmente tranquilos — dijo JiMin abrazado a Hoseok quien le correspondía el abrazo fuertemente.
— Si, es lo mejor, deberíamos ver una película — propuso el maknae tomando el control para ver la televisión.
— ¡Podríamos ver–! — no termino de hablar Taehyung cuando escucho que empezaba a llover.
— ¡Lluvia! ¡Lluvia! — grito emocionado Yoongi quien se había mantenido en silencio al estar tan concentrado en su dibujo.
— Me encanta la lluvia — hablo Jimin sonriendo al ver al pequeño tan emocionado — Ahora el ambiente es mejor, deberíamos ponernos los pijamas y acurrucarnos a ver películas. ㅡ Hoseok asintió a la idea de Jimin.
— ¡Yoobie quiere jugar bajo la lluvia! — dijo emocionado.
— ¡Yo también! Nunca he jugado bajo la lluvia. — dijo Taehyung con emoción.
— Nadie va a jugar bajo la lluvia — dijo Seok Jin que venía bajando con Namjoon detrás.
— ¡Papi! — se quejo el pequeño — quiero jugar bajo la lluvia...
— Papi ya dijo que no, Yoobie — dijo Namjoon — Ninguno de los dos va a salir, pueden enfermarse.
— Está bien, Hyung — hablo Taehyung — no saldremos — termino por hacer un puchero al igual que Yoongi.
— ¿A dónde van? — preguntó Hoseok al verlos cubrir sus rostros.
— Tenemos que hacer las compras, así que iremos ahora. ㅡ Respondió Namjoon arreglándole el pelo a Seok Jin.
— Pero ¿Y la lluvia? — preguntó preocupado.
— Iremos con cuidado, Hoba, no te preocupes — le dijo Namjoon con tranquilidad para no preocupar al bailarín.
— Está bien, vayan con cuidado por favor. — Pidió y les mostró una sonrisa.
— Estaremos bien — Seok Jin le devolvió la sonrisa y salieron.
Los chicos de inmediato se concentraron en buscar una película, mientras que Yoongi miraba por la ventana, habían muchos charcos de agua en el patio que se veían de lo más emocionante. El pequeño pensaba en que debía ser increíble saltar en esos charcos y quedar todo mojado por la lluvia. Y aunque aún le tenía un poquito de miedo, ese miedo se iba cuando estaba con los miembros porque sabía que estaba a salvo.
— Mi amor, sal de ahí — hablo Jimin — llevas como diez minutos mirando la lluvia.
— ¡Quiero salir a jugar, Mimi! — chillo con un puchero.
