El despertar de la loba blanca

Capitulo 37

OMNICIENTE

En el comedor del aquelarre estaban James, Marcos, Lucían, Bianca y Celeste desayunando ninguno emitía conversación ni amago de comenzar una, sin embargo Celeste sabía que tendría que hablar

CELESTE

-tengo que decirles algo- dije en voz baja, James y Marcos de inmediato captaron mi mirada, Lucían desvío su mirada hacia Bianca y ambos se miraban fijamente -no se como paso esto pero ayer me conseguí a Jana en el bosque- Marcos se comenzó a ahogar con la comida, Lucían puso cara de confusión, Bianca permanecía neutra y James me miraba con evidente confusión -¿esa no es la chica que estaba contigo en el campamento y fue desgarrada por el lobo?- preguntò Lucían con una confusión que me pareció, fingida, sin embargo decidí pasarlo, asentí y Marcos se levantó rápidamente de la silla para retirarse con arcadas -espera Marcos eso no es todo- Marcos me miro fijamente con lagrimas en sus ojos, no creí que le pegaría tanto saber de Jana -Jack estaba en la cabaña de ella, él a cuidado de ella todo este tiempo- Marcos puso cara de confusión y Lucían se quedó pensando -¿como es que ella esta viva si la despedazo un lobo?-pregunta Marcos de forma nerviosa -el ADN de los lobos es muy fuerte, sanan rápido la única manera de matar a un lobo es envenenamiento de plata en su sangre o apuñalar directamente su corazón, el lobo la atacó y dejó en su sistema el ADN todo su cuerpo sanó convirtiéndola en lo que ahora es- contestó Bianca, Marcos asintió -tengo que decirles algo- interrumpí, todos prestaron atención -lo siento mucho Marco Jack siempre fue Jack- comencé a decir con lagrimas en mis ojos, Marcos igual que yo dejaba fluir aquella cascada de sus ojos -siempre será Jack a pesar de todo, yo me iré con él - dije finalmente Marcos asintió rendido sin embargo una de las sillas se rodó de forma fuerte mostrando a un James bastante enfadado -tu, eres mi mate, me perteneces Celeste no te puedes ir con nadie más que conmigo- dijo el lobo de James su voz era gruesa y transmitía mucho miedo -la cosa es James que Jack también es mi mate, ayer ambos nos sentimos, no te siento a ti, como siento a Jack- respondi levantándome de la silla -ESO ES IMPOSIBLE, ESTAS MINTIENDO- Grito James dando un fuerte puño en la mesa, Marcos y Lucían se pusieron en posición de ataque -tranquilos- dijo Bianca soltando un humo blanco de sus manos y entrando en las fosas nasales de los tres hombres a punto de llevar la discusión a puños los tres volvieron sus ojos a la normalidad y se sentaron respirando algo acelerados -si es posible James, la cosa es que la diosa luna le está dando a Celeste la opción de elegir entre tu y Jack evidentemente ya Celeste eligió a Jack no te siente a ti, siente es a Jack por eso lo siente porque inconscientemente ella lo eligió a él- dijo Bianca, James hizo puño sus manos y se levantó, apuntandome con el dedo -te vas a arrepentir de esto Celeste Brown, eres igual de perra que tu abuela, la diosa se va a arrepentir de haber jugado conmigo otra vez- grito James frente a mi, se dio la vuelta y se retiró violentamente, mis labios se abrieron en un círculo, estaba completamente asombrada, que tiene James que ver con mi abuela, no me dio tiempo a preguntar por su rápida salida, me iba levantar a seguirlo, pero mis intenciones fueron interrumpidas-¿y la guerra?- preguntó Lucían con curiosidad -sigue en pie, no daré marcha atrás- mire a Marcos y su mirada era perdida como siempre que pensaba muchas cosas -no me dejes sola- le dije, levantó su rostro y estaba desecho, su rostro se había demacrado -ni aunque me dejes mil veces Celeste, pero entiende que será bastante difícil para mi- sin decir más nada se levanto y se retiró del comedor, derrepente la mesa comenzó a temblar y el techo a desmoronarse los ojos de Bianca se tornaron completamente blancos -estas maldita Celeste Brown él está enfurecido, lo mismo que vivieron tus antepasados lo vivirás tú, no tienes salida debes matarlo o el matará todo lo preciado que tienes en tu vida y por último te dejará a ti- dijo bianca con una voz gruesa, Lucían corrió hasta mi y me tomó en brazos, derrepente todo dejó de temblar y Bianca se desmoronó Lucían corrió hacia ella y la cargo en brazos -¿pero que diablos fue esto?- preguntó mi tío -estoy igual o peor que tu- respondí confundida -pero a quien debes matar, no entiendo- dijo con rostro interrogante y nervioso, estoy igual de confundida pero solo una persona viene a mi mente -Rob- formularon mis labios, él asintió -la llevaré a su habitación- dijo Lucían, antes de que el saliera entraron tres brujas casi corriendo y acompañaron a Lucían -¿que sucedió?- me preguntó una de las brujas que tenía mucha antigüedad -no lo sé comenzó a temblar todo- dije contándole lo que ha dicho Bianca poseída, la bruja asintió -ven conmigo Celeste- la seguí hasta un pasadiso subterráneo todo era obscuro, encendió unas llamas con sus manos y divisé libros muchos libros levitando en forma ordenada era como una biblioteca en una esquina había una piedra y un recipiente pequeño -vamos a tener que buscar tu historia y atar cabos Celeste porque con adivinanzas difíciles no podemos saber que sucede y el tiempo se acaba- dijo la bruja, asentí -dame tu mano- dijo, extendí mi mano y ella saco una daga de su costado la elevo y corto mi mano me acerco hacia aquel recipiente que se encontraba arriba de la piedra y vertió mi sangre allí, derrepente una de las hileras de libros comenzó a transmitir un destello blanco elevando varios libros en el aire y acercandolos a la piedra -esa es la historia de tus antepasados, bendiciones maldiciones y enemigos allí encontrarás las respuestas que buscas Celeste, estos son libros antiguos- asentí tomé asiento en el suelo y comencé a leer uno por uno, esperando conseguir las respuestas que he buscado.

JAMES

Maldita sea, me rechazó sin rechazarme aún, tengo que idear un plan para esto, necesito hacer algo ya mismo -Si, diga- contestaron al otro lado de la línea -necesitamos hablar y ponernos deacuerdo, yo necesito algo y tu necesitas algo, necesitamos ayudarnos y que cada uno logre su cometido- le digo a Isabella al otro lado de la línea -imagino que no te fue muy bien cariño- dijo riendo -imaginas bien respondí con rabia -vale nos vemos donde siempre en 2 horas- propuso -perfecto - contesté y corte la llamada, Celeste Brown tu serás mía cueste lo que cueste tu abuela tu madre y todos tus antepasados me las pagarán aunque me duela más a mi que a ti.