K (BL +18) [COMPLETA] ✓

A ti, en todas las estaciones.

Llegaste en el momento menos indicado y la verdad es que yo no estaba preparado para encontrarte.
 
Me miraste y deseé que no lo hubieras hecho, no porque no lo deseara con toda mi alma, sino porque no quería hacerte daño.  

Me tomaste en tus brazos cuando ambos éramos unos desconocidos, sonreíste y me cuidaste cuando en realidad debiste haber huido de mí. 

Yo amé a una persona por demasiado tiempo, una persona que era irremplazable para mí y que todos los días estaba en mi mente, jamás pensé que alguien podría ocupar ese lugar, sin embargo, eso hiciste. Borraste todo lo que él hizo conmigo, la incertidumbre, el dolor y me miraste y dijiste que te gustaba a pesar de que a ti no te gustan los hombres. 

Sufrí por ti y mucho, pero estuvo bien, lo necesitaba para darme cuenta que podía ser mejor y continuar con mi vida lejos de toda la basura que ya la rodeaba. 

Sostuviste mi mano cada día y cada noche, abriste tu corazón conmigo y todas mis barreras cayeron y comencé a amarte a pesar de que no podía aceptarlo. 

Moriría por ti de ser necesario. Te daría todo lo que poseo y más, porque eres lo que más amo. 

No te importó mi pasado, es más, hiciste que yo mismo lo viera y le dijera adiós sin remordimientos. Aceptaste mi estilo de vida extraño y caótico y mi manera algo estúpida de pensar. Me hiciste saber que de ser necesario me darías tu corazón aunque ya lo tenía en mis manos. 

Estuviste ahí incluso cuando fuiste rechazado una y otra vez por mis tontos prejuicios; me buscaste y volviste a tomar mi mano y me abrazaste cuando mi madre se suicidó; me hiciste dormir tranquilo cuando las pesadillas y las lágrimas no me dejaban en paz, cuando yo mismo me estaba perdiendo en la oscuridad. 

Me amaste por lo que soy, por lo que mi presencia representa para ti, no te importaron los hombres y las mujeres con las que me acosté por capricho y por rencor, dejaste que todo eso quedara a un lado y tomaste mi mano con más fuerza, aunque yo sintiera culpa por ello. 

Toleraste mis cambios, mi tristeza, las cosas tan bajas que hice para poder vivir; incluso el haberte dejado porque creía que era lo correcto, una salida fácil de tomar. Toleraste demasiadas cosas de mi parte y espero que me perdones por eso. 

Aceptaste que te diera un nombre simple y estúpido por el cual llamarme, no te importó mucho porque hacía aquello y cuando llegó a importante de verdad, guardaste silencio y decidiste esperar hasta que lo dijera, aunque tardara demasiado. 

Me ayudaste a ser una mejor persona. Una persona capaz de amar a otro por sobre todas las cosas y por sobre cada obstáculo y te agradezco por eso, mucho más de lo que mis palabras podrían algún día expresar. 

Desde el primer día que nos conocimos en aquel tren y hasta este día y los que aún faltan, espero que podamos pasar cada día juntos. 

Gracias por quedarte a mi lado. 

Gracias por amarme de entre tantas personas, porque de no ser por ti, yo aún seguiría solo.