David salió de la casa de su madre con el corazón roto. Su madre lo había echado de su vida por ser gay, no lo quería más. David se sentía solo y desamparado, no sabía qué hacer ni a dónde ir.
Sacó su celular y llamó a Gael. Le contó todo lo que había pasado. Le dijo que su madre se había enterado de su relación y que lo había rechazado. Le dijo que su hermana y su sobrino lo habían apoyado, pero que no era suficiente. Estaba triste y confundido.
Gael le dijo que lo quería mucho y que no lo iba a dejar solo. Le dijo que fuera a su casa, que ahí lo esperaba con los brazos abiertos. Ahí tendría un hogar y una familia.
David le agradeció a Gael por sus palabras y por su apoyo. Pero le respondió que primero necesitaba estar solo y pensar las cosas. Le dijo que necesitaba un tiempo para asimilar lo que había pasado. Después lo llamaría para verlo.
Gael respondió que estaba bien, que respetaba su decisión. Pero le pidió que se cuidara mucho y que no hiciera ninguna tontería. Que no se dejara influenciar por nadie ni por nada. Que no olvidara lo mucho que se querían.
David le prometió a Gael que se cuidaría y que no olvidaría su amor. Le dijo que lo amaba con toda su alma y que pronto estarían juntos. Los dos se despidieron con un te quiero y colgaron el teléfono. David guardó el celular en su bolsillo y siguió caminando por la calle. No tenía rumbo fijo, solo quería alejarse de todo y de todos.
Mientras tanto, Paloma estaba en su coche, observando todo desde una esquina. Vio salir a David de la vecindad en donde vivía con su madre, su hermana y sus sobrinos. Lo vio caminar por la calle con el rostro triste y abatido. Lo vio hablar por teléfono con Gael y luego colgar para después seguir caminando sin rumbo.
Paloma sonrió con malicia y pensó: "Ahora es mi oportunidad". Encendió el motor y se acercó a David. Bajó la ventanilla y le dijo:
- Hola, David. ¿Qué haces por aquí? ¿Estás bien? - Dijo Paloma fingiendo interés.
David se sorprendió al ver a Paloma. No esperaba encontrársela ahí. No sabía qué quería de él.
- Hola, Paloma. Estoy... Estoy caminando. Necesito despejar mi mente.
- ¿Despejar tu mente? ¿Por qué? ¿Qué te pasa?
- Es... Es mi madre... Acaba de suceder algo muy fuerte... Me ha dicho algo que me ha dolido mucho.
- ¿Qué te ha dicho, David? ¿Qué te ha hecho?
- Me ha dicho que... Que no me quiere más en su vida por ser gay.
David se quebró y empezó a llorar. Paloma fingió sorpresa y compasión.
- ¿Qué? ¿Cómo? ¿Qué dices, David? ¿Cómo puede ser eso?
- Es verdad, Paloma. Mi madre se enteró de mi relación con Gael, alguien le mandó unas fotos y ella se enteró de todo. Me rechazó, me echó de su casa y de su vida.
- Oh, David. No puedo creerlo, qué horrible, qué injusto.
Paloma abrió la puerta del coche y le dijo a David:
- Ven, David. Sube al coche. No puedes quedarte aquí. Te voy a llevar a un lugar seguro. Te voy a ayudar.
David no sabía qué hacer. Estaba confundido y vulnerable. Necesitaba ayuda y consuelo.
- No sé, Paloma. No sé si deba.
- Claro que debes, David. Yo soy tu amiga, yo te voy a apoyar. - Respondió Paloma fingiendo una voz sincera - Solo confía en mí.
David se dejó convencer por Paloma. Subió al coche y se sentó a su lado. Paloma cerró la puerta y arrancó el coche. Se alejó del lugar con una sonrisa triunfal, pensando en cómo todo le estaba saliendo de maravilla.
Paloma llevó a David a su casa. Lo hizo pasar al salón y le ofreció algo de beber. David aceptó un vaso de agua y se sentó en el sofá. Paloma se sentó a su lado y le dijo:
- David, quiero que sepas que estoy aquí para ayudarte. Puedes contar conmigo para lo que sea. Eres muy importante para mí.
- Gracias, Paloma. Te agradezco mucho tu apoyo. Eres muy buena amiga.
- David, alguna vez has pensado que... - Dijo Paloma haciendo una pausa - Gael no es bueno para ti. Solo te ha traído problemas y sufrimiento.
- Te pido que no vuelvas a decir eso, Paloma. Gael es bueno para mí, él me trae felicidad y alegría.
- No, David. Gael te engaña y te manipula. Gael solo quiere aprovecharse de ti y de tu bondad.
- Gael no me engaña ni me manipula. Gael me respeta y me valora. Me parece más bien que quién intenta engañarme y manipularme es otra persona - Respondió David ahora a la defensiva.
Paloma vio que David no se dejaba convencer por sus palabras. Decidió cambiar de estrategia y apelar a sus sentimientos.
- Tranquilo, David - Dijo Paloma intentando suavizar la situación - Piensa en tu madre. Piensa en lo mucho que la quieres y en lo mucho que ella te quiere.
- ¿Mi madre? ¿La misma que me echó de su casa y de su vida? ¿La misma que me dijo que no me quiere más?
- Te entiendo, David, entiendo lo que sientes. Pero entiende tú a tu madre, está confundida y dolida, en el fondo te quiere mucho y solo quiere lo mejor para ti.
- ¿Lo mejor para mí? ¿O lo mejor para ella?
- Lo mejor para los dos, David. Lo mejor para los dos es que tú seas feliz... con una mujer.
- ¿Con una mujer? No, Paloma. Eso definitivamente no va a suceder.
Paloma se hizo la ofendida al ver que no lograba manipular a David de ninguna manera.
- Pues entonces te vas a quedar solo, David, porque tu madre no te va a aceptar nunca y yo no creo que pueda ayudarte más.
David se puso triste, Paloma había tocado una fibra muy sensible en su corazón.
- No me digas eso, Paloma, no me hagas más daño, no me quites la esperanza.
Paloma se aprovechó de su debilidad y le dijo:
- Lo siento, David. Pero es la verdad. Si quieres recuperar a tu madre, si quieres tener mi ayuda, si quieres conservar a Gael; tienes que hacer lo que digo.
David se sintió confundido y vulnerable. Necesitaba recuperar a su madre, necesitaba tener su ayuda, necesitaba conservar a Gael. Paloma se lo ofrecía.
- ¿Qué tengo que hacer, Paloma? - Preguntó David con resignación.
- Tienes que darte un tiempo con Gael. Tienes que alejarte de él por un tiempo. Tienes que decirle que necesitas pensar las cosas. Tienes que terminar con él.
- ¿Qué? ¿Terminar con Gael? ¿Por qué?
- Porque así podrás demostrarle a tu madre que estás dispuesto a cambiar. Y así yo podré hablar con ella y convencerla de que te perdone. Así podrás volver con Gael cuando todo se solucione.
- ¿Y si no se soluciona? ¿Y si mi madre no me perdona? ¿Y si Gael no me espera? - Respondió David dudando.
- Se va a solucionar, David. Tu madre te va a perdonar. Gael te va a esperar. Solo tienes que confiar en mí.
Paloma le tomó la mano a David y lo miró directo a los ojos.
- Confía en mí, David. Recuerda que soy psicóloga. Yo sé cómo ayudarte. Sé cómo hablar con tu madre. Sé cómo hacer que todo mejore.
David se dejó convencer por Paloma. Le dijo que haría lo que ella le pedía. Terminaría con Gael. Así que sacó su celular y llamó a Gael. Le dijo que tenía que hablar con él, tenía que verlo.
Gael le respondió que estaba en su casa, esperándolo. Le dijo que fuera cuando quisiera. Que lo quería mucho.
David le dijo que también lo quería mucho y colgó el teléfono. Se despidió de Paloma y salió de su casa.
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Nuestro Amor Invencible (Gael × David)
FanficGael Torrenegro y David Alejo, descubren que más allá de la rivalidad por el amor de Leona Bravo, todo este tiempo en realidad estaban buscando la atención uno del otro. [Historia en construcción, espera nuevos capítulos]