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David estaba en la oficina de su trabajo, haciendo sus labores. Revisaba algunos informes y expedientes sobre sus pacientes. Estaba teniendo un gran día, se encontraba muy feliz e ilusionado por la propuesta de matrimonio con Gael.

Pero de repente, recibió una llamada por teléfono, era Gael. David respondió saludando, Gael le dijo que tenía algo que comentarle; Luis, el detective, ya había revisado el teléfono que Paloma. Gael le dijo que el teléfono estaba vacío, que no contenía nada.

- ¿Qué? ¿Qué me dices, Gael? ¿El teléfono estaba vacío? ¿No tenía nada?- Preguntó David con incredulidad.

- Así es, David. El teléfono no tenía nada. Ni contactos, mensajes, fotos, contraseñas, cuentas, datos, ni nada. - Expresó Gael con decepción.

- ¿Cómo es posible, Gael? Yo tomé el teléfono de la oficina de Paloma - Dijo David con confusión.

- No lo sé, David. Tal vez ese teléfono no era de Paloma. Tal vez Paloma tenía otro teléfono y este era solo una distracción. No lo sé. - Dijo Gael con frustración.

- No tiene sentido, Gael. De nada sirvió arriesgarnos a tomar el teléfono de Paloma si al final no contenía nada. - Dijo David con arrepentimiento.

- Lo sé, David. Pero no te preocupes. No todo está perdido. - Respondió Gael con optimismo.

- ¿Qué quieres decir? - Preguntó David con interés.

- Luis me dijo que había encontrado información importante en su investigación independiente. Luis me citó para hablar en algún lugar privado. - Dijo Gael con esperanza.

- ¿En serio? ¿Qué encontró? - Preguntó David con curiosidad.

- No sé, David. No me quiso decir por teléfono. Me dijo que era muy delicado y que prefería decírmelo en persona. - Respondió Gael con intriga.

- ¿Y dónde te citó? - Preguntó David bastante intrigado.

- En un café cerca de mi casa. Me dijo que nos viéramos a las cinco de la tarde.- Respondió Gael.

- Está bien, Gael. Ve al café y escucha lo que te tiene que decir Luis. - Dijo David.

- Sí iré al café para saber lo que me tiene que decir Luis. - Respondió Gael.

- Avísame de cualquier novedad, Gael. - Exclamó David.

- Sí, David. Lo haré. - Respondió Gael con compromiso.

David y Gael se desearon suerte y colgaron el teléfono.

David se quedó en su oficina pensando en voz alta. Se dijo a sí mismo que de nada sirvió hurtar el teléfono de Paloma porque al final no contenía nada. Se dijo a sí mismo que tal vez todo era simple paranoia.

Paloma iba pasando por ahí y escuchó lo que estaba diciendo David. Se dio cuenta de que ya estaban comenzando a sospechar de ella. Se dio cuenta de que quien habían tomado su teléfono para revisarlo era David. Se sorprendió y se enfureció al saber lo que habían hecho.

Paloma se asustó y se preocupó por lo que pudieran descubrir. Sabía que su teléfono estaba vacío porque lo había borrado todo antes de dejarlo en su oficina. Pero si lo habían tomado era porque ya tenían sospechas de algo.

Sabía que, si seguían indagando, seguro encontrarían algo sobre ella que comprometiera su plan. Tenía que actuar rápido y salir de ahí. Tenía que desaparecer antes de que la descubrieran y sus planes se vieran afectados.

Así que entró en su oficina y recogió sus cosas. Salió de su oficina y se dirigió a la salida. No se despidió de nadie ni dio ninguna explicación.

Nuestro Amor Invencible (Gael × David)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora