ZERO

CAPÍTULO 30

SHARON

Llegamos a un pequeño piso y subimos las seis plantas sin ascensor porque no había, toqué al timbre y esperemos a que nos abrieran.

Se abrió la puerta y me pareció muy pequeña para su robusto cuerpo.

— ¿Cabes por aquí?— Erika también lo notó.

— Ya la he roto varias veces y también me han robado en algunas ocasiones. Venga, pasar adentro.

Se aleja de la puerta y nosotras entramos de una a una siendo yo la última.

Bryan nos lleva hasta la cocina y nos ofrece un poco de caldo de pollo.

— Gracias.— agradecemos al unísono.

— Bryan,¿serías tan amable de contar un poco sobre tu vida a Erika?— pregunto por ella.

— Sí, no hay problema.— acepta— Bueno, hola Erika, ya nos habíamos visto antes. Me llamo Bryan Adams o también Deus.

>> Trabajo actualmente como entrenador de fútbol en un pequeño club para niños. Aunque mi aspiración siempre fue el atletismo. De pequeño era un campeón en las carreras, estaban a punto de transferirme a un club de atletismo y empezar a entrenarme profesionalmente. Pero claro, no me eligieron a mí, sino al rubio y blanco de mi clase sin importar que era más lento que yo. A día de hoy sigo sufriendo racismo en cualquier lado.
Pero ya no me importa el resto del mundo, sino sólo mi querida familia, la Shadow League. Ocupo el puesto de francotirador para las misiones, soy muy bueno en el tiro y soy el más fuerte y veloz del grupo, ventajas de tener genética de un africano.

— Vaya, qué lamentable.— Erika aprieta los puños — Han sido muy injustos contigo, tú merecías entrar al club de atletismo.

— Gracias.— Bryan agradece y va recogiendo la mesa — Qué bien que el jefe vio mis habilidades y me unió al equipo.

— Bueno, nosotras nos vamos.— me levanto de la mesa y le hago un gesto a Erika para que me siga — Hora de visitar a nuestra siguiente compañera.

Erika se levanta y salimos de la casa. Empecemos la marcha y nos dirigimos rumbo a una heladería.