Mǔgǒu •NichoJoo•

04. Someone like You

Sus pasos por el pasillo eran rápidos, pero en su rostro no había más que una mirada inexpresiva, sus amigos de seguro pronto comenzarían a buscarlo para ir a comer juntos por lo que debía colocarse la insulina lo antes posible, no le gustaba la idea de tenerlos cerca cada vez que debía inyectarse, por lo que apenas sus clases comenzaban salía disparado hacia el baño.

Una vez que estuvo en el baño, se metió rápidamente a un cubículo para cerrar la puerta y colocar su mochila sobre el retrete, para poder levantar su camiseta blanca, dejando al descubierto su abdomen con torpeza al sentir sus temblorosas manos, se dispuso a abrir la mochila para poder sacar su enfriador portátil, mientras un nuevo mareo venía, obligándolo a sostenerse de la pared por unos segundos hasta que el sonido de algo rodando en el suelo llamo su atención.

Enfocó su mirada en el suelo lo mejor que pudo para terminar notando la pluma de insulina que había dejado caer sin darse cuenta, por lo que algo alarmado se dispuso a tomarla, pero por su mal estado termino perdiendo el equilibrio, pateando la pluma lejos de él mientras intentaba sostenerse del baño.

EuiJoo se sentía realmente agotado, había estado estudiando para un examen hasta altas horas de la noche y su clase había sido demasiado larga, necesitaba con urgencia algo que lograra despertarlo, por lo que apenas finalizó su clase se dispuso a ir hasta el baño para entrar a este y mojar su rostro frente al gran espejo que había allí, escuchando la puerta abrirse poco después por lo que a través del reflejo pudo ver a dos chicos entrar al baño mientras él volvía a mojar su rostro, incorporando su cuerpo luego de varios segundos, deslizó sus manos por sus castañas hebras mientras que observaba su rostro, notando las leves ojeras que habían bajo sus ojos.

Sin embargo, aquello no le resultaba para nada importante cuando sus ojos de repente viajaron hacia un costado, viendo la puerta de un cubículo abrirse para dejarlo ver a un Nicholas realmente preocupante, su rostro lucía más pálido de lo normal, lucía como un zombie, sus movimientos eran torpes, pero cuando sus ojos se encontraron este se congeló en su lugar mientras escuchaba la voz de los chicos que se encontraban a un costado.

—¿Qué es eso?

Luego de incorporar su cuerpo, tomó algo de papel de mano y comenzó a secar su rostro, notando a través del espejo como uno de esos chicos se inclinaba para recoger algo del suelo, luego de levantar su mirada pudo encontrarse con Nicholas observando con algo de pánico la situación.

—Es un plumón, idiota —Se burló el otro chico se encargaba de tomar el objeto del suelo.

—Creo que he visto esto antes... —Comentó Gaku señalando la pluma de color azul mientras veía el chico quitarle la tapa, encontrándose con una fina y pequeña aguja en la punta—. Oh, mi abuelo tiene en casa por su enfermedad, es una pluma de insulina...

Nicholas vio a través del espejo al par de chicos, provocando que rápidamente cerrara la puerta para evitar ser descubierto por ellos, por lo que como pudo se dispuso a inyectarse una de las plumas que tenía guardada, tratando de así poder calmar los malestares que la diabetes le había generado por su descuido.

EuiJoo giro levemente su rostro para encontrarse con aquel objeto que el chico había recogido del suelo, dando una fugaz mirada hacia la puerta del baño donde el mayor de encontraba escondido, por lo que con todo el nerviosismo del mundo se atrevió a girar su cuerpo hacia los dos chicos, presionando con fuerza la correa de su mochila.

—Es mío —Dijo él de repente, haciendo que los dos chicos presentes voltearan a verlo con sorpresa—. No me di cuenta cuando lo deje caer, gracias por encontrarlo...

—¿Por qué tendrías una pluma de insulina? —Cuestionó el chico algo confundido mientras miraba al ojiazul.

—Porque necesito usarla —Murmuró él frunciendo levemente su ceño ante lo estúpido que había sonado esa pregunta, si decía que era suya era por una razón, aunque fuese mentira.

—EuiJoo no luces como alguien que deba usar...

—¿Entonces debo lucir como el abuelo de Gaku? —Preguntó él sonriendo con nerviosismo mientras extendía su mano para que le entregaran aquel objeto—. Hayate, te agradecería si me entregaras la pluma, no sabes lo que puedes provocar si no me la das...

—Es cierto, es mejor que se la des —Acotó Gaku haciendo una pequeña mueca con sus labios mientras miraba a su amigo—. Discúlpalo EuiJoo, no sabe de enfermedades más que su estupidez...

El joven de sonrisa encantadora dio suaves palmadas en la espalda de su amigo cuando este volteo a verlo con el ceño fruncido, Hayate volvió a dirigir su mirada hacia el ojiazul, observándolo fijamente por unos segundos como si lo analizara, cosa que provocó que EuiJoo sintiera un gran nerviosismo ante lo serio que lucía aquel chico, sin embargo este finalmente le entrego la pluma, yéndose con su amigo poco después, dejándolo finalmente solo, permitiéndole relajar su cuerpo mientras cerraba sus ojos por un par de segundos.

El sonido del seguro de una puerta abrirse lo hizo incorporar su cuerpo, dejándolo ver a Nicholas asomarse levemente por la puerta para verificar que estuviese cerrada, pero EuiJoo no hizo más que observar al de cabello oscuro, notando como la camiseta que llevaba puesta se encontraba alzada de un lado, dejando al descubierto parte de su abdomen y cintura, el ojiazul solo atinó a acercarse a este, notando como el mayor volteaba a verlo de inmediato.

Nicholas acomodó su camisa rápidamente, presionando con fuerza sus labios como si lo hubiera descubierto en una situación molesta, lo cual no dejaba de estar alejado de la realidad, realmente detestaba la idea de que Byun EuiJoo lo hubiese encontrado en ese estado, pero a la vez agradecía que se hubiese tratado de él y no de alguien más, por lo que simplemente extendió su mano para que el menor le diera su pluma, a lo cual el castaño se dispuso a sacarla del interior de su bolsillo.

—Deberías tener cuidado con estas cosas, deja de ser tan descuidado con respecto a tu salud —Regañó EuiJoo para luego darse la media vuelta, pero se le hizo imposible cuando la fuerte mano del mayor lo detuvo.

—¿Por qué lo hiciste? —Quiso saber Nicholas, encarándolo a pesar de que aún lucía débil.

—A veces un simple gracias esta bien —Murmuró él zafándose bruscamente algo molesto, sin preocuparse por ocultarlo de sus brillantes ojos—. Oh, es cierto, creo que eso es demasiado pedir para alguien como tú...

Nicholas le sostuvo la mirada al menor, viéndolo tensar levemente su mandíbula, a pesar de que sus azulados ojos le permitían ver lo mal que lograba hacerlo sentir con sus actitudes frívolas y abusivas, EuiJoo soltó una risa nasal mientras se daba la vuelta, aquella actitud tan a la defensiva del mayor realmente no le sorprendía, siempre había sido así, estaba acostumbrado a ver ese lado idiota en él, sin embargo aún no lograba entender como es que por algo tan pequeño este podía actuar como si realmente fuese su peor enemigo.