Una Vez Más

21. Jordan

Nadie dice nada mientras desayunamos. 

Aunque todos tengamos algo que decir, parece que es más lo que intentamos ocultar, fingir y rezar para que ninguno de los otros se dé cuenta y quiera hablar del tema.

Mamá ayuda a papá a llevarse los bocados a su boca, pero no lo mira, lo evita cómo él lo hace conmigo, estamos todos juntos, pero es como estar en una mesa con dos desconocidos.

 Necesito mudarme ya, no estoy seguro de poder soportar más todo esto, ni siquiera sé porque sigo aquí si tengo la posibilidad de escapar... Aunque si sé porque lo hago.

Cada tres minutos volteo para ver si ella entra por la puerta. Cuando pasé por su habitación para agradecerle el dibujo, toqué la puerta y no respondió, así que supuse que se levantó temprano para salir a correr, pero van pasando los minutos y ella no aparece.

Termino de desayunar y me levanto con la excusa de que tengo una reunión importante. De nuevo paso por la puerta de su habitación, pero esta vez no toco, solo entro, recorro el lugar y no veo las pocas cosas que ella tenía, no hay rastro de sus lápices, el escritorio está vacío y la esquina donde tenía sus dos maletas ya no están...Está claro que se fue y lo hizo de madrugada pero ¿Por qué? Anoche cuando nos despedimos todo estaba bien, tuvo que pasar algo... Y creo saber qué fue lo que pasó.

Bajo y encuentro a mi madre en la cocina.

— ¿Dónde está Salomé? —pregunto directamente.

Ella voltea para verme y traga saliva antes de sonreír.

— Creí que te avisaría...

— ¿Qué me avisaría qué?

— Ayer me dijo que quería mudarse, que no se sentía cómoda aquí y...

Asiento con la cabeza mientras habla y ella se interrumpe.

— Mamá por una vez ¿Puedes decirme la verdad? —me apoyo en la encimera y la miro fijamente.

Ayer no pudo decirle nada, puedo estar seguro de eso, yo estuve con ella... Espero a que me durmiera para hacerlo, para entrar a su habitación y decirle ¿Qué?

— Es la verdad Jory, ella es así... Solo era cuestión de tiempo para que decida irse y lo hizo...

— Anoche, le dijiste algo. —espeto y ella responde que no con un movimiento de cabeza—. Sí, estoy seguro de que lo hiciste, pero ¿Por qué?

— Jory... —comienza a pestañear más seguido. Esta nerviosa o está ocultando algo.

Levanto mi mano para peinar mi cabello y en el momento en que ella ve que tengo la mano vendada sus ojos se llenan de lágrimas. Abre la boca para decir algo, pero no lo hace.

— Ves porque no puedo creerte. —ahora le enseño la mano—. Porque lo escondiste, nos mentiste una vez más...

— Yo no...

— ¿Qué? ¿Alguien más botó basura en nuestro contenedor? —de reojo veo que papá entra a la cocina en silencio—. Llevan años mintiéndome, una y otra vez, los dos... Ya no soy un niño, no pueden intentar ocultar lo que está pasando...

— Yo le dije que no te dijera nada... —papá me interrumpe y se acomoda entre nosotros dos—. Yo fui quien quiso ocultarlo Jory.

Él quiso ocultarlo... tengo que hacer un enorme esfuerzo para no comenzar a reír. 

Ya ni siquiera sé que es lo que hago aquí, lo miro y exhalo profundamente mientras me encojo de hombros.

— Esto ya lo pasamos muchas veces ¿No? —digo y ambos me miran expectantes a lo que diré a continuación—. Me iré hoy...