9.

140 14 1
                                    

Luz

—Heey kiddo... ¿Como te sientes?—Eda se asomó al cuarto de su niña preocupada, la habían suspendido de la escuela por pelearse y estaba orgullosa, pero ese dia no llegó bien a la casa.

La entendía, la primera vez que asesino a alguien también fue un accidente, y no tuvo tiempo de pensar bien, estaba en medio de un robo y tuvo que escapar, desde entonces siempre procuraba no meterse con policías, solo tomaba el botín y escapaban, sin hacerle gran daño a alguien.

—Pues.. Mejor que ayer si, Willow me está mandando los trabajos que están llevando.—Al parecer la castaña no tenía ganas de hablar, se notaba en su voz sutilmente ronca—¿Que hay de ti? ¿Disfrutas tú descanso?

La mujer suspiro mientras formaba una pequeña sonrisa, esos dias habían sido muy relajantes, de no ser por que estaba preocupada por el estado de su niña.

—Pues, ya puedo descansar.

—Por eso se llama descanso—Dijo la latina con sarcasmo y un poco de burla en su tono de voz, la dama búho solto una carcajada, esa niña era identica a ella cuándo se lo proponía.

—Almenos deberías salir, te servirá hacerlo—En eso Luz le hizo caso, se levantó y se preparó para salir y vio cómo empezaba a buscar un grupo en WhatsApp—Pero sola, Luz.

La adolescente la miró confundida, la compañía era buena en la mayoría de las salidas.

—Creeme, vas a despejar mas la mente así, ir con amigos es divertido, lo se; pero necesitas un momento de libertad fuera de tu depósito de basura

Eda miró el cuarto un buen rato reforzando sus palabras, ese cuarto necesitaba un día de limpieza que ella no haría.

—Bueno, tocará confiar en ti, eso por lo general no me lleva a algo bueno—Sonrió viendo como su mentora hacia una mueca molesta y salió de la casa, para llegar a la ciudad siempre era un lío.

Estando ahí, Luz decidió ir directo a un parque poco transitado de ahí, era muy bonito pero a la gente no le gustaba las vibras que daba, parecía embrujado y abandonado (Que era casi asi) aparte estaba en una zona peligrosa de la ciudad.

—Mierda... aquí no desperdician clientes—Pudo ver con claridad como unos hombres vendían casi sin discreción unas bolsitas a unos niños de su edad, quienes parecían emocionados pero disimulaban de manera torpe.

—Para nada, pero el parque es tranquilo si ignoras eso.

Una voz extraña detrás de ella, al voltearse, vio a un chico de cabello verde oscuro muy atractivo, se parecía tanto a...

—¡Amity ven a saludar!—El chico tenía una fuerte voz, en eso Luz se dió cuenta de que era la familia Blight, bueno, sólo los hijos.

Los tres lucían como unas estrellas de cine juntos, vestían elegantemente y seguramente sus ropas eran mas costosas que la creación de ese parque. Llevó los manos dentro de los bolsillos de su pantalón gastado viéndolos.

—¡Luz Noceda! Que lindo verte en persona—Emira le sonrió con picardía y le extendió la mano, la morena le estrechó la mano sin querer ser grosera.

—Hola, no esperaba verlos... aqui.

Cualquiera estaría tan sorprendido como Luz, no siempre se veía a gente rica en esa parte de la ciudad y menos a familias de renombre como los Blight; eso le preocupaba, eran muy fácil de identificar por su cabello verde y ojos dorados.

DelincuenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora