Después de una decepción amorosa deciden cada quien seguir con su camino hasta el día de su gira después de muchos años, 16 para ser exactos.
Un triángulo amoroso estará envuelto en problemas y amoríos.
Me encontraba en la galería con Bill y él me veía como si quisiera decirme algo.
- Ya habla Bill - Comenté mientras acomodaba las pinturas.
- Quiero... Terminar esta relación - Lo voltee a ver - Conocí a alguien hace unos días.
- Esta bien - Sonreí - Nosotros no fuimos hechos para ser novios, amigos si pero nada más - Lo abrace - Ahora cuéntame de ella.
- Es una chica hermosa - Sonrió - No sé cómo describir lo que siento al verla. Mientras él veía
Sabía que nosotros no éramos muy compatibles pero fue lindo, realmente me gustó pasar tiempo con él pero es momento que él siga adelante en ese sentido. Escuche cada detalle de como se conocieron y en eso llegó Tom con unas cajas de pizzas con Heidi.
- ¡Hola linda parejita! - Exclamó Heidi.
- Nueva noticia - Mencioné - Terminamos - Los dos se sorprendieron.
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Al enterarme de esa noticia sentí alivio pero también quiero que ambos sean felices al menos juntos.
- Que mala noticia - Comenté.
- No pasa nada, nos llevamos mejor como amigos - Comentó Bill - Es más sano estar así .
Todos nos sentamos en el suelo para poder comer todos juntos y pasar el rato mientras. No dejaba de pensar en cómo sería si Allison y yo volviéramos a estar juntos.
- Alguien está afuera - Comentó Bill y me levanté a ver de quien se trataba.
- Mierda... - Fui abrir para salir y que él no entrará - ¿Ahora qué quieres Robert?
- A ti... Te quiero a ti - Agarró mi mano - Fui un tonto y quiero arreglar esto.
- No hay nada que arreglar - Comenté con cierto enojo - Ya no quiero saber nada de ti, eres un poco hombre ¿Ya te dejaron? ¿Ya dejaste a la otra familia sin dinero? Nosotros dos ya no somos nada y nunca lo seremos ya mejor vete que me haces perder mi tiempo - Él me agarro fuertemente y me empezó a sacudir y solo vi como alzó la mano y cerré los ojos esperando tremenda cachetada pero no sentí nada y al abrir los ojos Bill y Tom ya estaban ahí, Heidi me agarro con delicadeza y me alejo un poco mientras que Tom lo golpeaba y Bill lo insultaba.
- ¿Quién es? - Preguntó Heidi mientras me ayudaba a relajarme.
- Mi ex novio - Comenté mientras veía como le pegaban y él pedía ayuda hasta que les dije que se detuvieran cosa que ambos hermanos me hicieron caso.
Llamamos a una ambulancia mientras yo les sana las heridas de las manos.
- Llegan ellos y no quiero que saquen las manos de los bolsillos para que no sepan que nosotros tuvimos algo que ver, yo me encargó de que él no diga nada malo después - Asintieron y esperamos a la ambulancia con Robert inconciente.
Cuando llegaron los paramédicos hicieron unas preguntas y todos dijimos que ya estaba ahí cuando salimos ya que escuchamos ruidos mientras nosotros comíamos y apareció él, no sabemos nada más, la ventaja es que ahí las únicas cámaras que tengo dan a la entrada y no a esa parte de mi local, los paramédicos se lo llevaron y nosotros entramos en silencio a la galería.
- Pareces jefa de la mafia - Comentó Tom y todos reímos.
- Creo que me vendría bien entrar a ese mundo - Comenté - Sigamos comiendo - Reímos y nos volvimos a sentar.
Pasamos el rato y ninguno volvió a tocar el tema hasta que Bill se llevó a Heidi porque ella ya estaba pasada de copas por el vino que saque.
- ¿Entonces era tu ex? - Preguntó Tom mientras caminabamos por las calles de Italia en la noche.
- Si, nos íbamos a casar - Miré el suelo - Él me quería por mi dinero y no me gustó la idea... Todo el esfuerzo que hice no se lo iba a quedar alguien más - Miré a Tom con una sonrisa triste - Hace poco apareció pero nunca creí que él iría hasta la galería... Gracias por ayudarme, también les voy a dar las gracias a Heidi y a Bill.
- No agradezcas, para eso estamos - Reímos - Te vamos a cuidar todos nosotros - Seguimos caminando mientras hablamos de varias cosas hasta que llegamos a mi casa y cuando abrí la puerta y voltee para abrazarlo él me agarro de la cintura y me beso, fue un beso tierno pero apasionado al separarnos nos quedamos viendo y sonreí nerviosa.
- Bueno, pues ya voy a entrar - Él me soltó nervioso también - Me avisas cuando llegues.
- Si, te mando mensaje - Se dio la media vuelta y se fue, cerré la puerta y me quedé recargada en ella procesando lo que acaba de pasar.
