Cuando Chanyeol regresó a Seúl, jamás imaginaría que dejaría sus maletas botadas en el aeropuerto para correr y encontrarse afuera de esa iglesia donde sería el testigo de la unión entre quien fuera el amor de su vida y su ahora ex mejor amigo; tamp...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Ya me contaron que serás papá.
Miró rápidamente a su amigo, viendo cómo tenía sus labios apretados tratando de no reír ni tirar su cerveza en la barra. De inmediato vio a Junmyeon que bebió de su vodka haciéndose el loco, y Chanyeol sólo pudo frotar su frente al tiempo que soltaba un profundo suspiro.
Ya había olvidado lo chismosos que los hermanos Kim podían llegar a ser.
— Se me hacía raro que ustedes dos me invitaran a beber en domingo que sé es el día que se reservan para ustedes. Vine porque creí que sólo querían pasar tiempo de calidad con su mejor amigo y que se estaban disculpando por no haberme dicho nada de la boda —dijo haciéndose la víctima, a lo que Sehun golpeó ligeramente su brazo.
— Ya nos disculpamos por eso, Chanyeol, y claro que te estamos invitando, tú no pagarás nada, lo hará Junmyeonnie —el pelinegro alto se inclinó a besar la mejilla de su novio, para luego volver a él—. Pero no podíamos ignorar esta información. Es decir, tú, quien odia a los niños y jamás ha deseado ser padre, ¿estuviste acariciando el vientre de un chico embarazado? Chanyeol, a nosotros nos puedes decir la verdad —su amigo visiblemente curioso le miró—. ¿Embarazaste a ese hombre? ¿Lo conociste en Japón?
Abrió en sus ojos en demasía mientras negaba múltiples veces.
¿Por qué todos creían que era suyo?
— ¡Por supuesto que no! Su hijo no es mío. Es un chico que acabo de conocer y tiene problemas y lo estoy ayudando, eso es todo, no hay más. No es mío, no soy su papá —puntualizó con firmeza, aunque no se sintió tan correcto decir eso.
Era como si dijera que Hyunjin no era lo suficientemente especial como para que él quisiera ser su papá.
— Ya, ya, sólo era una pregunta —Junmyeon entró como mediador, quien luego se le quedó mirando—. Pero debo confesarte que dolió escuchar eso, Chanyeol, me dolió por Suji —confesó el mayor y eso le hizo sentir peor—. Ella siempre tuvo la ilusión de formar una familia contigo y, aunque a veces pienso que eres un idiota, yo también quería que fueras mi cuñado —una sonrisa melancólica se dibujó en los labios ajenos, una que pareció volverse amarga cuando apretó estos—. Eres mil veces mejor que Donghyung, pero es un tema que ya no quiero tocar o se me reventara el hígado —asintió teniendo la tentación de decir el secreto de su examigo y Baekhyun, pero se contuvo, no abriría la boca sin el permiso de ese castaño—. Mejor dinos, ¿qué pasa entre ese chico y tú?
Los dos pares de ojos marrones se les quedaron mirando y Chanyeol se sintió cohibido unos segundos por la intensidad en estas.
—¿Entre él y yo? Nada, sólo lo estoy ayudando —dijo con simpleza, aunque los rostros del par parecían incrédulos—. Lo digo en serio. Únicamente le estoy ayudando porque está solo, tampoco está pasando una buena racha económica y tiene muchos problemas encima —suspiró dando un último trago a su bebida—. De alguna forma, me hace recordar a mi madre y a mí y me es difícil ser indiferente, no ayudarlo se siente incorrecto.
