The Prince Who Was Promised

Dragonstone.

Narrador omnisciente.

Lord Walder Frey había organizado un gran banquete para todos sus hombres, celebraban la gran victoria al obtener Riverlands, el hombre miraba hacia su gente y todo parecía lo bastante normal como para una cena, aunque Walder Frey no era quien estaba sentado en su mesa frente a todas esas personas, era alguien más, alguien que quería venganza, alguien a quien menos esperaban.

El hombre levantó su copa y la golpeó contra la mesa para que los demás dejasen de hablar, cuando tuvo su atención se puso de pie.

-Se preguntarán por qué los invité- Comenzó -Después de todo, acabamos de celebrar, ¿desde cuando el viejo Walder nos da dos fiestas en una quincena?- Sus hombres rieron -Bueno, no vale ser lord de Riverlands si no puedes celebrar con la familia, eso es lo que yo digo-

-¡Si!-

Walder Frey chasqueo sus dedos ordenando a las mujeres a servir el vino.

-He reunido a cada Frey con algo de maldita importancia para decirles mis planes para esta gran casa ahora que ha llegado el invierno- Hizo una pausa -Pero primero ¡un brindis!, ¡no más de ese Orín Dronish! ¡Éste es el Arbor dorado más fino! El mejor vino para los mejores héroes-

Las copas se levantaron con vitoreos, Walder Frey alzó la suya haciendo que todos los demás se pusieran de pie.

-¡Todos juntos!- Dijo 

Observó cómo sus hombres comenzaban a beber el vino, notó como su pequeña esposa tomó una copa y se la dirigía a su boca.

-Tú no- La detuvo -No voy a desperdiciar un buen vino en una maldita mujer- Se giró nuevamente hacia los demás Frey y dejó su copa sin beber en la mesa -Quizás no sea el hombre más placentero, lo admito, pero estoy orgulloso de todos ustedes. Son mi familia, quienes me ayudaron a masacrar a lady Stark y a los hombres de los Stark en la Boda Roja-

-¡Si!- Celebraron 

-Valientes, todos ustedes- Siguió -Degollaron a una madre de cinco, mataron a los invitados después de haberlos invitado a su hogar, pero no masacraron a todos los Stark- Los hombres comenzaron a tocar sus gargantas con dolor -No, no, ese fue su error, han debido arrancarlos a todos, tallo y raíz- Ellos comenzaron a escupir sangre ahogándose con esta misma, mientras caían de a poco -Deja un lobo vivo y las ovejas nunca estarán a salvo-

Cuando todos ellos cayeron al suelo muertos, las jóvenes observaron a Walder Frey, este acercó la mano a su cara y se la quitó revelando el rostro de Arya Stark, quien había vengado a su madre y a la Boda Roja, Arya se giró para observar a la pequeña esposa de Walder Frey.

-Cuando te pregunten que paso aquí, diles que el Norte recuerda- Ordenó -Diles que el invierno vino por la casa Frey-

Rhaenys Targaryen.

-Quiero que cada maestre restriegue los archivos por las pruebas de Vidriagón- Pidió Robb 

-El Vidriagón mata a los Caminantes Blancos- Informó Jon -Es más valioso que el oro-

-Debemos hallarlo, extraerlo, fabricar armas con él- Continuó Robb -Todos entre la edad de 10 y 60 años perforarán con lanzas, picos, arcos y flechas-

-Es hora de enseñarles a estos muchachos a luchar- Bromeó lord Glover 

-No solo a los varones- Corrigió -No podemos defender el Norte si solo la mitad de la gente lucha-

Lord Glover se puso de pie; -¿Pretendes que ponga una lanza en la mano de mi nieta?-

-No voy a estar tejiendo mientras los hombres luchan- Se adelantó lady Mormont -Yo tal vez sea pequeña, lord Glover, una niña, pero soy tan norteña como usted-