+3000 AÑOS ANTES.
Caos era lo unico que veía la joven, era lo unico que había en el campo de batalla en el cual se encontraba. Hace varios años atras todo estaba bien, la ojiazulados no sabia que habia cambiado. Hacia que la raza demoníaca e la raza de las diosas no se soportaban ni en pintura, pero tampoco era para llegar a esto.
Se estaban destruyendo entre si, y tan solo para ver cual de ellas era la mejor. Observó a varios de su escuadrón entrar al territorio enemigo e sin mas, los siguió. Como arcángel e como lider de ellos tenia que ir, no era algo que ella pidio, para nada. Su hermano la mando aca aun sabiendo que a ella no le gustaba atacar a seres inocentes pero para su hermano mayor, los dominios no lo eran.
Giro la cabeza observando a su alrededor la destrucción que se armo en poco tiempo. Los dioses que estaban ahi, luchaban contra los demas demonios que aparecían. Ella no queria matarlos, no era la forma en la que la plateada lo hacia, asi no.
Voló alto extendió sus ahora grandes alas, observando como habia unos cuantos demonios, que a siempre vista se veia que no querían estar ahi. Alzo su brazo asi currando las heridas de sus compañeros que batallaban. La azulada claro que pelea e bien, eso lo sabian con certeza todos por algo varíos le temían e otros solo no hacían sin antes pelear con ella. No queriapelear sin antes saber si el oponente contrario lo siquiera asi, tenia con certeza que varias lo hacian por obligación e otros por voluntad propia, y ahi es en donde ella peleaba. En contra de esos seres que solo querian ver destrucción en este bello mundo.
Bajo de las alturas yéndo hacia esos demonios que no querían estar en estos, al principio cuando estaba a pocos metros de ellos, algunos se asustaron e otros solo se quedaron inmóvil. Al ver eso, se acercó con cuidodo para no espantarlos.
-vengo en paz... -se acercó sonriendoles con confianza, ellos la miraron atentos a cualquier cosas. Despues de todo era uno de los cinco arcángeles- vine hablar con ustedes, no quiero pelear.
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Por otra lugar, más bien por otra parte de la batalla, en el mandó enemigo. Se encontraba un joven demonio dando órdenes claras a sus batallantes.
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𝑩𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕 𝑬𝒚𝒆𝒔; 𝐴𝑟𝑡ℎ𝑢𝑟 𝑝𝑒𝑛𝑑𝑟𝑎𝑔𝑜𝑛
FanfictionEl desorden de emocionés que provoca tu sonrisa; lo que me haces sentir, la forma en que me miras; el contacto de nuestros labios, el caos que ordenas y lo bien que encajas en mi vida. Un amor tan real, tan fuerte y tan bonito. ᴇᴍᴘᴇᴢó: 𝟏𝟐-𝟕-𝟐𝟎...