El desorden de emocionés que provoca tu sonrisa; lo que me haces sentir, la forma en que me miras; el contacto de nuestros labios, el caos que ordenas y lo bien que encajas en mi vida.
Un amor tan real, tan fuerte y tan bonito.
ᴇᴍᴘᴇᴢó: 𝟏𝟐-𝟕-𝟐𝟎...
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•✎↻ •破られた約束...
UN PELIROJISO SE ENCONTRABA entrenando afueras del reino en un gran campo brillante ante sus ojos. Levanto su espada al aire con la atenta mirada de su amada en el, eh siguió con su entrenamiento.
Sentada debajo de su árbol favorito, tomando un poco de la bebida que había traído anteriormente su amado, entre sus pensamientos trataba de saber a qué queria llegar zaneri con mostrarle todo esto, ya tenía sus memorias, no veia porque quedarse.
Lo observo mientras tomaba varios sorbos de esa bebida, mientras lo veia no pudo evitar sonreírle, en serio sabia que antes estaba tan completamente enamorada de ese chico, de sus ojimorados. Tomo una toalla y un vaso con agua del pequeño lugar en donde estaba, eh se fue acercándose al ver como terminaba su entrenamiento, todo cansado.
Se veia tan real estos momentos que hasta pensaba que había vuelto al pasado para encontrarlo.
Se acercó a pasos calmados hasta estar cerca suyo mientras le entragaba el agua, vio como se lo tomaba con rapidez eh soltaba un fuerte respiro. En un movimiento ágil antes de que el tomará la toalla para secarse, lo agarró del rostro mirándolo fijamente y empezar a secarlo por su cuenta.
-No es necesario... podía hacerlo por mi cuenta. -habló sonrojado ante la acción de su amada. La plateado simplemente negó sonriendole.
-Lo tenía claro pero igual queria hacerlo por ti.. -lo observo desde arriba ya que era mucho más alta que el pelirojiso. Azulados siempre lo hacía cada vez que entrenaba pero esta vez, el joven rey noto su comportamiento extraño pero simplemente creyó que era por la guerra santa, y no por otra cosa.
Paso por última vez la toalla por la cara de su amado eh se le quedo observando, una pequeña carcajada se fue formando en sus labios al verlo sonrojado como un tomate. La risa no se hizo esperar eh llego a los oidos del rey, quien se le quedo viendo un poco molestó pero con cierta gracia ante aquella risa contagiosa.
-¿Porque te ríes de mi? -pregunto un poco dramático mientras intentaba hacerse el ofendido. Para la azulados el era adorable tanto como sus dramas y su rostro "furioso".
