•✎↻ •良い晴れた日...LA LUZ SOLAR ENTRABA por una de las grandes ventanas que tenía el castillo de Camelot, páginas de hojas eran pasadas de un lado a otra mientras la susodicha miraba atenta las escrituras plasmadas en esas dichas hojas. Pasos de armaduras se escuchaba afuera de esa gran habitación, demostrando que había guardias cuidando el castillo y el reino de Camelot todo el tiempo.
La plateada con mechas negras suspiró viendo cada papel que tenía entres sus manos, era muchas cosas que atender, demasiado problemas y pedidos de los habitantes del reino. Desde que despertó de aquella siesta se había sentido un poco perturbada por aquel sueño, pero gracias a un joven pelinaraja que la habia ayudado a dormír por la noche, se sentía mejor.
Despejó los ojos de los papeles para observar la gran ventana que daba al jardín del Castillo. Desde que Merlín termino de usar al rey de liones como conejillo de Indias y lo llevo al reino de vuelta, no había volvidó y para la mala suerte que traía la plateada, los deberes de su amiga cayo en sus hombros como bolsas pesadas de metal. Todo eso se junto con sus deberes como guardia eh como maestra de entrenamiento de los caballeros de Camelot y también más sus salidas que tenia con su escuadrón. Se sentía ¿Estresa? pues no, esto para ella no era ningún problema, pero en verdad se le hacía un fastidió. Para ser una guardia real, era muy floja.
Pero en una parte de todo esto, tenía que agradecerle a la hechicera, ya que gracias a los deberes que dejó, ella podría pasar tiempo con su majestad. Si se pusiera a pensar en verdad le gustaba pasar algo de su vida con el joven rey, podría ser muy emocionado con las cosas que le gustaba, ¿fastidioso? Seguro, pero más de todo eso. En serio le caía más que bien, el rey Arthur le estaba mostrando algo más que dolor en la vida, sus dias anteriores no eran para nada iluminandos como los de ahora, se sentía en paz cada vez que lo veia o con tan solo de ver su bella sonrisa.
Era un sentimiento que ella no entendí muy bien aun.
-¿Le pasa algo señorita? -El joven que se encontraba en su escritorio viendo algunos papeles al igual que la ex pecado, habló al ver como su Guardia perdía su mirada en la gran ventana que daba al jardín. Millie volteó su cabeza para verlo, ella estaba en unos de los sillones de la gran habitación del rey mientras que el nombrado estaba en el único escritorio del lugar.
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𝑩𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕 𝑬𝒚𝒆𝒔; 𝐴𝑟𝑡ℎ𝑢𝑟 𝑝𝑒𝑛𝑑𝑟𝑎𝑔𝑜𝑛
FanfictionEl desorden de emocionés que provoca tu sonrisa; lo que me haces sentir, la forma en que me miras; el contacto de nuestros labios, el caos que ordenas y lo bien que encajas en mi vida. Un amor tan real, tan fuerte y tan bonito. ᴇᴍᴘᴇᴢó: 𝟏𝟐-𝟕-𝟐𝟎...