CAPÍTULO 12

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Matthew

Lo que pasó hoy con Megan me tiene todavía en trance. Aun no me termino de creer que haya sucedido.

Cuando decidí ir a la casa de Adriana lo hacía con la intención de quizás encontrármela, no esperaba verla de esa forma y menos que nos confesáramos las cosas como lo hicimos.

Al llegar a mi casa me encuentro como en una nube, todo parece de fantasía y de ensueño. La sonrisa de mi boca nadie me la puede quitar, porque al fin estoy con la mujer que no ha dejado mis pensamientos por semanas.

Volver a sentir sus labios fue un regreso a la realidad de lo que estábamos haciendo. Extrañaba esos labios suaves y carnosos que tanto había estado imaginando de nuevo.

Woow— dice Matthia cuando me ve sonriendo por la videollamada —si que te ves feliz amigo ¿qué ha sucedido? Hace mucho que no veo esa sonrisa en tu cara.

—Qué no ha sucedido más bien.

Eso quiere decir que la reunión estuvo excelente.

—Más que excelente.

¿Y vas a contarme o solo alardear?

—Yo fui con la intensión de verla, pero nos terminamos besando y confesando de todo.

¡Bien! ¡Ese es mi amigo! ¿son novios ya?

—No, aun hay cosas que debemos aclarar. Pero acordamos conocernos más, ser cuidadosos, no contárselo a nadie y lo más importante ser exclusivos.

¡Wow! De primera entrada dejando en claro ese punto.

—Creo que ambos buscamos algo serio y a lo mejor duradero.

—Espero que sí amigo ¡Felicidades!

—Gracias Matthi.

Quien creo no va a estar feliz va a ser otra— sé que se refiere a Gabriela.

—¿Por qué?

—Tiene semanas preguntándome si tienes novia.

—¿Le has contado algo?

—Claro que no, a ella no debe importarle ese tipo de cosas.

—Lo sé, pero está intentando ser nuestra amiga.

En mil siglos va a suceder eso, aun no sé por qué sigue saliendo con nosotros. Parece que tiene un radar, siempre que intentamos salir juntos ella se entera de alguna manera.

—Acordamos ser amigos.

Pero no amigos íntimos como para tener que salir con ella cada fin de semana o contarles las cosas personales.

—Ella está intentando hacer las cosas bien.

¡ERROR! Ella está intentando recuperarte disfrazada de tu amiga, esa idea nadie me la va a quitar.

—Veremos que pasa más adelante con todo esto.

—¿Salimos mañana?

—Creo que iré a ver a mi abuela. Desde el accidente intento estar más pendiente de ella, aunque no les agrade que esté llegando cada fin de semana.

—Iré contigo, si estás de acuerdo.

—Claro que sí amigo, sabes que eras como un nieto para ella quizás te recuerde y sea todo más ligero de llevar.

—Me parece bien, ¿a qué hora nos vemos ahí?

—10AM puede ser.

—¿10 de la mañana? Creí que me dirías que a las 3PM.

Sobre nuestra pielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora