CAPÍTULO 23

9 0 0
                                    

Megan

Hace 3 semanas comencé mis prácticas profesionales en la empresa del papá de Matthew. Aunque esto me ha llenado de recuerdos de nuestra conversación por esta empresa, he intentado dar lo mejor de mí cada día.

Sin embargo, tenemos una supervisora que solo pasa hablando de Matthew y de lo grandiosa que es su relación. Ella dice que tienen 6 años saliendo, lo que me hace pensar que Matthew estuvo saliendo conmigo mientras la veía a ella y eso me enfurece más.

Sé que ella es la chica con quien lo vi en el bar antes de comenzar las prácticas, que ella sea mi supervisora ha sido una de mis mayores torturas. No sé si ella sabe sobre la relación que tuve con Matthew, pero estoy segura de que lo sabe por como me habla de él cuando estamos a solas y de lo grandioso que ha sido vivir con él los últimos meses.

La odio.

Llego a casa después de un largo día de trabajo y me voy directamente para mi cuarto. Aunque Matthew y yo terminamos hace 1 mes y medio, me sigue doliendo nuestra ruptura y que Graciela hable de él todo el día no me ayuda en nada, solo me destroza más el corazón.

Si es cierto que ellos están saliendo me alegro de que haya podido superarme y al fin avanzar en una relación que no debe esconder, con la que no debe mentirle a nadie y con la que sí puede formar una familia con la que Graciela ha alardeado toda la semana.

Me tiene mareada ya.

Me acuesto en mi cama con mi pijama ya puesta y toco el collar que Matthia me dio, el collar que Matthew me compró en Italia y que me daría en su regreso. Sin poder evitarlo comienzo a llorar recordando todo lo lindo que teníamos antes de que todo se destruyera.

Tocan la puerta de mi cuarto y alguien entra sentándose a mi lado.

—La cena ya está servida ¿irás a cenar?— pregunta Emma, es la persona que menos quiero ver y la que menos quiero que me vea llorando.

—No tengo hambre.

—Megan, ¿sigues llorando por Matthew? Ya ha pasado más de 1 mes desde ese incidente, ni con Julio lloraste de esa manera.

—¿Será porque a Julio no lo amaba y a Matthew lo sigo amando?— se queda callada viendo hacia otro lado hasta que voltea a verme de nuevo, esta vez con una expresión de tristeza.

—Oh... así que lo que tenías con Matthew era verdadero.

—Sí, Emma, siempre lo ha sido no sé por qué mamá y tú se han empeñado en creer que él jugaba conmigo cuando nunca fue así.

—Oh Megan, lo siento tanto.

—Solo déjame a solas, Emma.

—Megan, tengo que decirte esto porque el verte así me está matando.

—¿Ahora qué, Emma?— me siento en la cama con los ojos rojos de tanto llorar y la observo.

—Yo fui quien le dijo a mamá que ustedes estaban juntos.

—¿QUÉ TÚ HICISTE QUÉ?— siento la sangre hervir dentro de mis venas ante su confesión y solo pienso en querer golpearla o tirarla por las gradas.

¿Por qué siempre hace cosas que me hieren? ¿Tanto me odia mi hermana como para hacer esas cosas?

—Creía que él solo estaba jugando contigo y quise protegerte de él, jamás creí que lo que ustedes tuvieran fuera real.

—¿QUÉ LE DIJISTE A MAMÁ EXACTAMENTE?— me levanto de la cama furiosa para encararla 

—Le dije que los había visto un par de veces saliendo y besándose, no creí que los fuera a encontrar desnudos en tu habitación. Ese día Julio me avisó que Matthew había regresado de su viaje, pero no sabía que se había venido para acá y fue cuando le dije a mamá lo que había visto y por eso los encontró así.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 07, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Sobre nuestra pielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora