This Time

✨12✨

Capitulo 12-Algo que nos debemos...

Ok... Que sigue luego de haber dicho semejante estupidez.

Supongo que reírme, eso haría una persona normal ¿no?

Pero luego está el hecho de que mi madre siempre me ha dicho que muy normal no soy, así que no creo que eso esté dentro de los límites.

Y ahora que lo pienso, ¿por qué habría de reírme cuando expreso mis verdaderos deseos?

Ay no Rachel, ya cálmate.

-¿Arrepentida de lo que acabas de decir? -Pregunta Chris.

-¿Es tan obvia mi cara de desastre? -Me río nerviosa. -Este no es mi fuerte Chris.

-Pero estabas toda diosa en ese escenario dedicándome una canción.

-Pues sí, resulta que si hay cosas que sí puedo hacer sin titubear y sin sobrepensar acerca del resultado.

-Hey, somos tu y yo, Rachel y Christopher, los que más errores hemos cometido en el mismo espacio de tiempo, tú y yo, somos los que se han dejado ir tantas veces que ahora nos cuesta un poco encontrarnos, pero estaremos bien.-Y que Dios baje y me diga que esto está mal, que Dios me detenga porque yo no puedo.

Todo parece tan correcto, tan perteneciente que ya no se ni que pensar.

-En términos de errar tenemos un certificado Rach, nos graduamos con honores.-Me dice.

-Tienes razón, y duele un poco admitirlo, pero en términos de dejarnos ir, creo que mi graduación fue con la mejor promoción, no creo que alguien tenga la fuerza de voluntad para cometer el mismo error varias veces.

-Pues deberías decirle eso a Ross.

-¿Ross the divorces force?-Inquiero sabiendo que habla de su personaje favorito de Friends.

-Pues, ese mismo Ross, es el que luego de tantos años y errores acabó junto a su langosta.

-¿Crees que estamos siquiera cerca de acabar como ellos?-Pregunto.

-Es un buen inicio que tú también te llames Rachel ¿no crees?

Ambos reímos, y esto que acaba de pasar, no se puede definir como otra cosa que algo que nos debíamos, desde hace dos años.

Riendo lo abrazo, sabiendo que no vamos a ir más lejos.

Eso tomaría todo de mí, y por hoy ya hice bastante, eso es lo más lejos que he estado de demostrar un sentimiento hacia alguien.

Y no miento asusta, pero a veces se siente bien tener ese miedo.

***

El timbre de mi teléfono logra despertarme en una mañana de sábado que probablemente, pronto será mediodía.

Apenas abro los ojos cuando contesto la llamada y solo emito un sonido haciéndole saber a mi oyente que estamos comunicándonos.

-Luz de mis ojos-Me dice la voz de mi papá al teléfono.-Por algo mi día está oscuro, mi luz estaba dormida a las once de la mañana.