Sus mejores años habían pasado, pero ahí estaban poniendose unos ajustados trajes qué no dejaban nada a la imaginación, se pusieron gafas oscuras y los uniformes de policía que habían solicitado, eran casi las 8 y pronto iniciaría su momento.
Emil sumia la panza, trataba de no respirar tratando de minimizar los años que habían pasado - vamos Nekola... Se valiente... Lo que importa es la actitud - lo animaba Christophe.
- Lo dice un hombre que paga mensualidades en el mejor gimnasio de la ciudad.
- No van a reconocernos, quizá hagamos el ridículo pero lo hacemos por Vik, eso debería ser suficiente.
- Vamos Chris... Estoy dudando seriamente qué esto vaya a servir...
- Viktor siempre nos ha ayudado, en buenas y malas... Quién fue el amigo que te ayudó a llevar tu local cuando te habías lastimado la espalda, después de aventarte del ropero en una noche de pasión? - aquel cambio a mil colores.
- No lo digas por favor... Es vergonzoso.
- Pero es la verdad!!, quién fue el que defendió a Otabek cuando se metió con la novia del líder de taekwondo?.
- Por favor!!!, debo decirlo qué ella mintió diciendo que no tenía novio!! - replicaba el kazajo.
-Me consta!! - añadía Nekola.
- Como sea!! - gritaba Giacometti - el ha estado en buenas y malas, de mi parte estuvo conmigo cuando me divorcie de Phichit, fue el que más insistió en no dejarme solo, me acompañó en mis noches de parranda y debo confesar que varias veces vomité su auto y aun así me perdonó!!.
- Dijiste que no habías sido tu!!! - gruñía el ruso.
- Eso ya no importa, lo importante es que llegó el momento de mostrarle nuestro apoyo, así que... Fuimos casanovas... Y lo seguimos siendo!! - la mirada de los omegas estaban puestos en ellos, todos sentían un escalofrío recorrer su espalda - ya no somos solteros pero... Podemos seguir siendo casanovas para nuestros omegas!!, ténganlo en cuenta.
- Si esto es demasiado para ustedes... Dejenlo ya... - pedía el ojiazul.
- No es momento de buscar una de tus excusas he irte...
- Si vuelve a rechazarme yo... Creo que será demasiado para mi... Rompí muchos corazones, ahora pago con creces, no podré soportarlo si el... Me rechaza de nuevo.
- No pensemos en eso... Ya estamos aquí y no nos iremos sin entrar!! - asintieron y gritaron en afirmación al unísono.
Con sus uniformes listos entraron por la puerta principal, Christophe tenía aquella tarjeta dorada qué era el pase directo, sobra añadir qué habían añadido varios ceros a la cuenta de los verdaderos strippers para que les cedieran el lugar.
En cuanto entraron las luces se apagaron, eran varios asistentes qué ahora aplaudían y gritaban esperando el espectáculo principal.
La música comenzó a sobar, todos se miraban aterrados sin saber que hacer, Me Against the music, sonaba a lo alto, nadie se movía sintiéndose tontos, pero el primero en mover su cadera y presentarse al frente era Emil, causando furor entre los asistentes.
El segundo en acompañarlo fue Giacometti, jalando al ruso obligandolo a participar, Otabek torció los ojos, no le quedó de otra que ir al frente con ellos, movían sus caderas, jugaban con su ropa, las asistentes gritaban, incluso eran tocados sin previo aviso, el evento se lleno de gritos de euforia.
El primero en comenzar a quitarse la ropa fue Giacometti, los demás lo siguieron, las asistentes les chiflaban, aplaudían pidiendo que bailaran más.
El ambiente estaba a lo máximo, el ruso no dejaba de moverse buscando con la mirada a Yuuri, lo encontró con una mirada incomoda que reflejaba qué no le gustaba el evento, se acercaba a el para llamar su atención, pero era vigilado por aquella mujer con la que se topó en la tienda de novios.
Le dio un golpe a Giacometti, necesitaba de su ayuda para llevarse a Yuuri, pero los asistentes eran demasiados para ellos, cuando pensaron que su sacrificio había sido demasiado, aquellos stripper que se supone eran los verdaderos, entraron causando furor, no sabían porque había acudido a su ayuda, pero tantos hombres atractivos hacían qué fuera más fácil lograr su cometido.
In your eyes, había comenzado Viktor se acercaba llamando la atención de Yuuri, pero en cuanto aquella chica sintió sus intenciones se acercó para interrumpir el acercamiento, por suerte Giacometti la había jalado hacia el centro pidiendo aplausos para que todos los bailarines la hicieran el centro del baile, los asistentes gritaban emocionados, y a ella pronto se le olvidó cuidar del omega.
Fue el momento justo para que aquel ruso se lo llevara a la parte trasera sin que nadie lo notará, el omega gruñía, pidiendo que lo soltara, amenazó con gritar, cuando Viktor reveló su identidad - pero que demonios haces aquí?! - cuestionaba el azabache - ya hablamos lo suficiente.
- Lo se, se que soy quien menos debería estar aquí pero... Debía hablar contigo, intentar hablar por última vez...
- Qué más vas a decirme?, ya es tarde... A caso no lo entiendes?!.
- Ese es el problema... No lo entiendo!!, se que cometí un error, me asusté!!, siempre he tenido miedo al matrimonio, siempre he sentido que se convierte en una jaula por la que la pareja termina peleando por espacio, siempre he pensado que los te amos se transformaran en palabras de reproche!!, se que soy estúpido pero estoy siendo honesto!!, el matrimonio de mis padres fracasó!!, el de mis tíos también!!, vi a la gente que más admiré en el suelo sin nada!!, aunque soy un alfa no soy perfecto, estoy seguro que mereces algo más que esto... Lo se!!, pero juro que nadie te amará de la misma forma que yo!!, de una forma tan torpe y alocada!!, quizá peleemos, quizá llegue el momento que pienses que no debiste estar conmigo, pero juro que no tiraré la toalla, si sientes que el amor no es suficiente te daré motivos de donde sea para que sepas que estar conmigo fue lo mejor que pudiste hacer... Conmigo... Tendrás la familia que siempre quisiste... Harás la fiesta que tanto soñabas, no la qué tu cuñada quería... Escogerás el traje qué más te guste no el que otra persona quiera, conmigo Yuuri serás quien siempre has sido... Jamás te cuestionaré por ello, te juro Yuuri qué conmigo solo seras tu... Y solo tu... En mi corazón.
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Una Noche Para Los Corazones Rotos
FanfictionUna noche cualquiera, 4 alfas se reúnen, como cada año, 4 alfas estúpidamente enamorados, que ahora desahogan su desdicha con alcohol... Aquello será suficiente?