La cena termina y cada uno se va su habitación. Horacio y Andrea suben a la habitación de Andrea. Andrea no sabe que hacer porque no quiere dormir con Horacio en la misma cama, puesto que en París cada uno dormía en una habitación diferente en el departamento de Andrea.
Andrea no aguanta y sale corriendo de la habitación, se va al jardín y se sienta en una silla al lado de la piscina, se queda mirando las estrellas, piensa en SG y se toca la barriga pensando en que su bebé no va a conocer a su verdadero padre y se pone a llorar.
Sofía ve a Andrea y baja al jardín para hablar con ella.
-¿Andrea qué te pasa?-pregunta Sofía.
-Nada, solo quería estar sola.-responde Andrea triste.
-No me mientas, sé que te pasa algo.-dice Sofía.
-Me pasa que ya no puedo más y que fue un error casarme con Horacio.-dice Andrea.
-¿Por qué dices eso?-pregunta Sofía sorprendida.
-Porque me casé con Horacio para no decepcionar a mamá, para que no tuviera que pasar otra vergüenza de ver que otra hija es madre soltera y también lo hice para que mi hijo tenga un padre.-responde con pena Andrea.
-No entiendo lo que me quieres decir.-dice Sofía.
-Que la noche que volví a Houston y me fui a la playa, conocí a un hombre con el que hice el amor, que no sé como se llama y que no he vuelto a saber nada de él.-responde gritando Andrea.
-¿El hijo qué estás esperando es de ese hombre?-pregunta sorprendida Sofía.
-Sí, es del amor de mi vida.-responde llorando Andrea.
-Andrea, nunca me imaginé que tú pudieras hacer algo así.-dice Sofía.
-¿Te he decepcionado?-pregunta Andrea que sigue llorando.
-Por supuesto que no, al contrario es bonito eso que me cuentas.-dice Sofía abrazando a Andrea.
-Eso no es todo, el día que nació Arturito yo me iba a casar con él.-dice Andrea.
-¿Cómo?-pregunta Sofía.
-Cuando llegué a la Iglesia ya era tarde y él ya se había ido.-dice Andrea.
-Tienes que encontrarlo. Si quieres yo te puedo ayudar.-dice Sofía.
-Gracias, pero no creo que pueda encontrarlo no sé nada de él.-dice Andrea.
Sofía le dice a Andrea que pueden dormir juntas en la habitación de Sofía y Andrea acepta encantada.