Cuando Arturo, Flavio y Samuel llegan al Rancho Alcázar, Arturo y Flavio se van a dormir y Samuel se encierra en su despacho, Soledad lo ve y entra al despacho para hablar con él.
-¿Cómo os ha ido?-pregunta Soledad.
-A mis hermanos bien, a mí, mal.-responde Samuel triste.
-¿Por qué?-pregunta Soledad.
-Porque hoy he visto a Andrea tres veces y la tres veces me ha tratado mal.-responde Samuel triste.
-¿Dónde la has visto?-pregunta Samuel.
-La he visto esta mañana en el centro comercial porque la he seguido, después la he visto en el restaurante donde yo estaba cenando con los inversionistas y luego en el Rancho del Junco.-responde Samuel triste.
-Tienes que tener paciencia. Andrea no es una mujer fácil y ahora con el embarazo menos.-dice Soledad.
-Le voy a tener toda la paciencia que necesite, me voy a ganar su amor y le voy a demostrar que yo no soy como ella piensa.-dice Samuel.
-Me alegra oírte hablar así. Mi niña no puede tener hombre que la quiera más que tú.-dice Soledad.
-Gracias Soledad por todos tus consejos.-dice Samuel.
En el Rancho del Junco, Andrea empieza a pensar que quizás Samuel tenga razón diciendo que él no sabía que ella es Andrea del Junco, pero piensa que no puede ser débil y caer en sus redes, aunque por otro lado está esperando un hijo suyo y él tendría que saberlo.