Cuando Samuel llega al Rancho Alcázar, se va a su despacho y piensa en su brujita y en la forma tan original que tiene de despedirse de él, siempre le dice que lo odia. Samuel sabe que cada día vez está más cerca de recuperar a Andrea.
Cuando Andrea llega al Rancho del Junco, sube a la habitación de Sofía y se acuesta en la cama, no puede dejar de pensar en Samuel, sabe que la próxima vez que Samuel se le acerque lo va a besar.
-¿Has vuelto a ver al padre de tu hijo?-pregunta Sofía.
-Lo he vuelto a ver varias veces.-responde Andrea.
-¿Te ha dicho qué te ama?-pregunta Sofía.
-Eso me lo dice todos los días.-dice Andrea.
-Lucha por él, tu hijo tiene que conocer a su verdadero padre.-dice Sofía.
-No sé qué hacer.-dice Andrea.
En ese momento entra Irina.
-¿Qué te pasa?-pregunta Irina.
-Andrea, Irina es nuestra hermana, tiene derecho a saber lo que te pasa.-dice Sofía.
-Irina me pasa que he visto al padre de mi hijo.-dice Andrea.
-Yo sabía que Horacio no podía ser el padre de tu hijo, es muy poca cosa para ti.-dice Irina.
-Tampoco hables así de Horacio, él se casó conmigo sabiendo que el hijo no es suyo.-dice Andrea.
-A mí, Horacio no me gusta para ti. ¿Y quién es el padre de tu hijo? -pregunta Irina.
-Un hombre que conocí en la playa.-responde Andrea.
-¿Cómo se llama?-pregunta Irina.
-No lo sé.-responde Andrea.
-Quien iba a decir que mi hermana Andrea del Junco tan decente esté esperando un hijo de un desconocido.-dice Irina.
-No le digas nada a nadie.-dice Andrea.
-No voy a decir nada.-dice Irina.
-Gracias, Irina.-dice Andrea.
A la mañana siguiente, Samuel llama por teléfono a Sofía.
-Hola Sofía.-dice Samuel.
-Hola Samuel.-dice Sofía.
-Necesito que me des el número de teléfono de Andrea, es que necesito hablar con ella sobre unos caballos del hipódromo.-dice Samuel.
-Samuel conmigo no necesitas disimular.-dice Sofía.
-¿Qué tengo qué disimular?-pregunta Samuel.
-Sé que Andrea y tú, tuvisteis algo.-responde Sofía.
-Yo te puedo explicar lo que pasó.-dice Samuel.
-Quiero una explicación, así que mañana nos vemos en el Rancho Alcázar para hablar.Te mando un mensaje con el número de Andrea-dice Sofía.
Samuel no sabe como se ha enterado Sofía que Andrea y él tuvieron algo, pero piensa que se lo tiene que haber contado Andrea.
Samuel llama a Andrea por teléfono.
-Brujita antes de que me cuelgues, te llamo para hablar sobre unos caballos del hipódromo y te invito a cenar esta noche en el restaurante donde me pegaste.-dice Samuel.
-Ahí nos vemos.-dice Andrea.
Samuel se sorprende al escuchar que Andrea no ha puesto ningún problema para ir a cenar esta noche.
Por la noche, Samuel se arregla y se va al restaurante. Cuando Andrea llega al restaurante Samuel se levanta y le coge la silla para que se siente.
-Buenas noches.-dice Samuel.
-Buenas noches.-dice Andrea.
-Estás preciosa.-dice Samuel sonriendo.
-Gracias.-dice Andrea sonriendo.
-Me resulta raro que me hables tan amable.-dice Samuel.
-¿Quieres qué te vuelva a hablar mal?-pregunta Andrea.
-No.-dice Samuel.
-Háblame sobre esos caballos del hipódromo.-dice Andrea.
-Eso era una excusa para verte.-dice Samuel.
-Lo sabía.-dice Andrea.
-¿Y entonces por qué has aceptado venir a esta cena?-pregunta Samuel.
-Porque tenía ganas de verte.-responde Andrea.
-¿Eso quiere decir qué me perdonas?-pregunta Samuel.
-Eso quiere decir que tenías ganas de hablar contigo.-responde Andrea sonriendo.
Samuel y Andrea piden la cena. Toda la cena se han estado sonriendo. Cuando terminan de cenar Samuel se ofrece a acompañar a Andrea a su casa pero cada uno en su coche y ella acepta.
Cuando llegan a la puerta del Rancho del Junco, Samuel se despide de Andrea diciéndole adiós, aunque se queda con ganas de besarla y se va al Rancho Alcázar.