Jodidos Alfas

Despertar

Italia se giro sobresaltado por la noticia mirando al español, lo que no se esperaba era verlo despierto sentado y confundido en la cama.

España: ¿Qué...?- pregunto confundido con un hilo de voz.

Italia quedó en silencio, no sabía que hacer, no esperaba verlo despierto y confundido mirándolo sin saber que había pasado. Rápidamente su desconcierto y enojo pasó a segundo plano y se volvió en un instinto protector.

Italia: No te sientes animal...- dijo enfadado mientras se acercaba a su amigo- Te has golpeado la cabeza y puede hacerte daño burro.

España río suavemente ante la preocupación de su amigo, Italia sintió como los colores se le subía y se ponía completamente rojo. Desde que leyó que su amigo era un omega en aquellos papeles el sentimiento que guardaba dentro de su ser empezó a correr libre por sus venas, pues ya no había un solo motivo por el cuál ir a buscarlo.

Italia se acerco al español y con una delicadeza que ni él mismo conocía ayudo a su amigo a sentarse y poner detrás de su espalda un cojín para que estuviese cómodo.

España: Gracias...- susurro

Italia no respondió, se quedo de pie mirándolo fijamente llevando su mano al rostro del español y acariciándolo suavemente como si temiera que de repente su amigo acabara por terminar de romperse en sus manos. España lo miró confundido al principio, pero era algo extraño que el italiano hiciera un lindo gesto con él sin decir o hacer alguna tontería de por medio, quiso disfrutar un poco más que su amigo le brindaba el español por lo que cerro sus ojos y acerco un poco su rostro al español, moviendo la cabeza como un gato buscando mimos. Italia sintió como el aire dejaba de entrar en sus pulmones y sus pupilas se dilataban más de lo que debería, de repente y como si una venda hubiese caído de sus ojos el español empezó a brillar más fuerte que nunca, su pelo se hizo más intenso, sus ojos más grandes y claros, sus labios más carnosos y rosas y su piel brillaba levemente a la luz del sol, a los ojos del italiano España se acababa de transformar en una criatura mucho más hermosa de lo que ya era. No sabía muy bien a que se debía esto y sinceramente no lo quería saber. España se había vuelto hermosos a sus ojos, mucho más de lo que ya era, si era verdad lo que los papeles decía debía averiguarlo y si en verdad España lo era, debía cortejarlo antes de que alguien más supiera. Pues España pasaría a ser prácticamente un omega no solo extraño pues él hubiese conseguido lo que ni un otro omega logró, sino que también podía volverse el deseo enfermo de cualquier alfa, un omega que puso de rodillas a más de uno, que lo miraba a los ojos sin titubear y que era capaz de lanzar un fuerte grito de respuesta a una pelea... sí, sin duda España se acababa de convertir en un objeto único a los ojos de muchos alfas ¿y qué pasa con los objetos únicos ante la mirada de poderosos? Exacto, algo valioso que deben de obtener a cualquier costo, es por ello que Italia debía de marcarlo antes, de esa manera nadie podía apartarlo de su lado, de esa manera por fin podría volver a tener a España otra vez en su cama.

Italia sentía la como su mano se volvía cálida por la zona donde el español lo tocaba, este acabo por abrir sus ojos y mirar al italiano directamente a lo suyos sin titubear.

España: ¿Italia?- llamo dulcemente confundido por su amigo- ¿Sucede algo, Italia?

"Dios... no sabía que mi nombre podría sonar tan bien"

Italia recibió un fuerte impulso de besarlo ahí mismo, confesarle todo, confesarle que una parte importante de él nunca lo olvido, confesarle que lo deseaba aún cuando era alfa y que ahora sabiendo que era omega suplicarle que lo aceptará como suyo.

" Aunque sea omega podría patearte el trasero" el italiano recordó eso de golpe, había recordado esa sutil amenaza del español hacia él. Entonces recordó también que si era verdad lo de su naturaleza no era una mentira lo que le había dicho, si España era un omega ya le había demostrado de sobra que si se enfadaba podía hacerle daño. Italia redirigió entonces su deseo hacia la frente del español dándole ahí un gentil beso.