Rosa, Adelfa y ... ¿Dalia?

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España se encontraba asustado y tenso ante la pregunta del estadounidense, estaba tan cerca que el español podía oler perfectamente su olor a rosa al tal punto que le picaba la nariz.

"¿Puede olerme?" se pregunto aterrorizado "¿Cómo es posible? Pero... si yo siempre me hecho mi colonia antes de salir, yo siempre lo oculto ¿Cómo?" 

España empezó a intentar recordar de como era posible que eso pasara hasta que recordó la noche anterior, cuando el italiano se quedo a pasar la noche en su casa, ambos habían vuelto a compartir cama como hacia siglo que no hacían, aunque no paso nada más que un abrazo y hablando de las inseguridades del español por ser un omega. España se había bañado y  no se había puesto su colonia para que el italiano pudiese olerlo y vaya que si lo olio. Pues Italia había permanecido abrazándolo con su rostro oculto en el cuello del español toda la noche. España se tuvo que bañar para poder quitarse el olor del alfa del cuerpo y evitar preguntas incómodas, pero igualmente se le había olvidado ponerse la colonia, pues Italia le rogo esa noche que no volviera  a ponérsela pues quería tener al autenticó España a su lado, con su olor, su voz y sus sonrisa.

España se puso rojo por la petición del italiano pues era muy tierno lo que le había dicho y eso hizo que su corazón diese un salto. Pero ahora su corazón que estaba sin mover un solo musculo había empezado a chillar y saltar como un loco al sentir a aquel alfa sobre su cuerpo.

"¿Qué me pasa? ¿Por qué estoy así? ¿Será por las pastillas? Nunca antes me había puesto tan ansioso por tener a un alfa tan pegado a mi" España estaba confundido y asustado, usualmente guardaba la calma en situaciones así, donde un alfa lo retenía o se acercaba "No, es porque él lo va a descubrir, me huele, huele que soy un omega.. debo, debo de apartarlo"

España agarro los brazos del americano mientras ponía ambos pies en el suelo, de un rápido movimiento tiró empujando las manos de americano hacia arriba, cuando se tambaleo por la perdida de equilibrio haciendo fuerzas con los pies, España, giro su cuerpo. Ahora era el americano que lo miraba tumbado en el césped.

USA lo miraba confundido al español, pero este se levanto y empezó a correr intentando subir la pendiente sin resbalarse. Pero no pudo y en un resbalón acabo por deslizarse otra vez hacia abajo. España movía los brazos intentando mantener el equilibrio pero cuando estaba a punto de caer unos brazos lo sostuvo desde atrás en un fuerte abrazo.

España miró hacia tras mirado al americano que lo miraba seriamente de vuelta. España sintió el aire faltarle y como se ponía extremadamente nervioso ante la mirada del americano. No se sentía a gusto revelando ese secreto, aún no. Pero temía que ya era tarde y el americano lo había descubierto.

España: Lo sabes...- susurro.

USA no dijo nada solo asintió lentamente mirando al español.

España: ¿Cómo?...- pregunto con un hilo de voz casi sintiendo que se iba a poner a llorar.

USA sentía su corazón estrujarse en su pecho, quería ser sincero con él y decirle todo, pero temía que lo mandara a la mierda por habérselo querido follar siendo alfa o un asqueroso que lo espiaba. No quería que le tirase sus claveles a la cara creyendo que lo hizo para cortejarlo y no por genuina preocupación hacia él. No quería mentirle, pero tampoco quería perderlo, no cuando ya lo tenía tan cerca.

USA: Tu olor, España...- susurro acercándose otra vez al cuello del español sintiendo como este se tensaba en el acto- Es más dulzón que agrio, es más a un omega que alfa. Además de que tu reacción no te ha ayudado en nada. ¿Cómo pudiste sobrevivir durante tanto tiempo fingiendo tan mal?

España no dijo nada, solo se quedo ahí agarrando las manos del americano que estaban sobre su vientre, sintiendo su respiración en el cuello y el olor a rosas que de repente lo envolvían por completo.

Jodidos AlfasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora